Para El Amor No Hay Edad ~ Agustín Casanova (EN EDICIÓN)

Capítulo 7:

Agus se levantó y fue a buscar su piano, observo bien la habitación, supongo que es la de él, las paredes eran gris claro, el piso era parecido al mío, sólo que con un poco más oscuro.

- ¿Que cantamos?.- dice sentándose con su piano sobre las piernas.

- Mmm... No se... ¿Creo en ti de Reik?

- Dale, empeza vos cantando.

- Mira, si llego a romper algo, o pasa algo, vos tenes la culpa.

- Cállate y canta dale...- dice riendo.

- Ya no importa cada noche que esperé, cada calle o laberinto que crucé, por que el cielo a conspirando a mi favor, y a un segundo de rendirme te encontré...

Cantar justamente esta canción con el me hacía sentir tan bien y al mismo tiempo me ponía tan nerviosa.

- Piel con piel, el corazón se me desarma, me haces bien y enciendes luces en mi alma...- la sigue él.

- Creo en ti, y en este amor, que me vuelve indestructible, que detuvo mi caída libre, creo en ti, y mi dolor se quedó a kilómetros atrás, mis fantasmas son por fin estan en paz...- cantamos ambos.

- El pasado es un mal sueño que acabó, un incendio que en tus brazos se apagó, cuando estaba a medio paso de caer, mis silencios se encontraron con tu voz...

La voz de Agustín es tan hermosa.

- Seguía.- me dice al notar que me quede callada.

- Ya cante bastante.- respondí negando con la cabeza a lo que él me pone los ojos en blanco en forma de broma.

- Tenes una voz hermosa.- me dice apagando el piano.

- Si claro, hermosamente horrible.- reí leve.

- No seas boba, tenes una voz hermosa.- repite serio mirándome a los ojos.

- Bueno... Gracias.- le dije algo sonrojada mirando mis manos.

Siempre que alguien me mira fijo de esa manera, me pongo nerviosa y juego con los anillos de mi mano evitando el contacto visual.

- Vamos a mirar una película.- Propone.

- Bueno, pero de terror no porque después no puedo dormir.- sonrío.

- Ah dale.- dice haciendo puchero.

- Bueno, pero si después no puedo dormir te voy a venir a molestar a vos. Estas avisado.

- Vos nunca me molestarías...- dice ternura.

- ¿Que película vas a poner?- pregunto cambiado de tema.

- El conjuro 2.

- ¡NO! Agustín no seas malo.- le pego suave en el hombro en broma.

- Dale, yo te cuido.

Mi corazón da un vuelco ante la pronunciación de esas palabras saliendo de su boca.

- Ponela antes de que me arrepienta.- digo poniendo los ojos en blanco en broma.

Nos sentamos a verla en la cama con su laptop, yo me asustaba hasta con lo mas mínimo que pasaba, Agustín se reía y me abrazaba.

Me encanta y odio que haga eso, por que la verdad yo me ilusiono bastante con las ideas que pasan por mi cabeza, que se muy bien que no van a pasar.

Yo nunca voy a estar en una relación con él, el nunca va a estar con una nena como yo teniendo a un millón de fans de su edad muchísimo más lindas, y agregando que no soy más que su prima.

- Ey, ¿que pasa?- pregunta poniendole pausa a la película.

- Nada, ¿por qué?

- Estas llorando, decime.

Siento como una lagrima desciende por mi mejilla, rápidamente pasó mi mano para parar el recorrido de esta, estaba llorando y no me di cuenta.

- Nada, estaba pensando en bobadas, no pasa nada, en serio, te juro que si pasa algo yo te digo.- le miento sonriendo.

- Bueno... Podes confiar en mí para decirme lo que quieras.- responde sin estar convencido de lo que dije.

Me pasa si, me pasa que te amo, sólo que yo soy una nena de 14 años en la cual nunca te vas a fijar, eso pasa, y también pasa que no tengo el valor para decirte las cosas que me pasan.

- Si, claro.- sonrío.