Alive

387 25 0
                                    



Capítulo 10: Alive


Bella quedó asombrada por la manera en la que se veían Rosalie y Emmett, casi con admiración. Su estómago se removió con una dolorosa incomodidad al pensar que Edward jamás la había visto así.

Y no lo hará, le dijo una dura parte de su conciencia.

Empujando los dolorosos pensamientos se dio cuenta de que la expresión de Rosalie había cambiado, ahora lucía un tanto reflexiva.

—Emmett —dijo la rubia seriamente— antes que nada, quiero agradecerte por lo que has hecho por mí. Y por esto, quiero decirte que estaré a disposición tuya y de tu familia, y me quedaré aquí hasta que haya saldado mi deuda.

—Rosalie... —respondió el pelinegro— no hay nada que agradecer, ese sujeto lo merecía y eso de saldar una deuda no será en absoluto necesario, está bien...

—No —cortó—, no está bien, tengo que agradecerles de alguna manera, así sea ayudando en el castillo. Me he dado cuenta de que no hay gente suficiente aquí... —Rosalie vio que Emmett iba a rechistar así que lo cortó de nuevo—. Como tú no quieres colaborar de ninguna manera iré con tu padre, luce como alguien mucho más razonable, tú estás actuando de una manera un poco tonta.

Y sin más, Rosalie empezó a caminar entre los pasillos del castillo gritando el nombre de rey con Emmett siguiéndola, tratando de darle indicaciones correctas para llegar a su padre. Cuando Bella percibió que estaba completamente sola pensó que no sería mala idea salir un momento para tomar aire, esas últimas horas habían sido bastante agitadas con la llegada de la joven rubia.

Cuando salió sintió el vigorizante golpe de aire en el rostro, sus pies se movieron casi automáticamente rumbo a los árboles a los que Edward la había llevado en alguna ocasión. En el momento en el que estaba a punto de llegar, una gélida y enojada voz la hizo crisparse.

—¿Qué se supone que estás haciendo aquí? ¡¿Acaso ya estás pesando escaparte?!—

—¿Qué? —preguntó confundida. Al voltear pudo ver a Edward, tenía las manos fuertemente cerradas en forma de puño, se veía muy enojado—. No, yo no...

—Claro que lo pensabas, ¿no? —aseguró el cobrizo, interrumpiéndola, pero esta vez su voz sonó dolida. Bella se sintió irritada. ¿Por qué tenía que cambiar su actitud tan de repente?

—No es lo que dices —Cuando la joven vio que estaba por interrumpirla de nuevo se acercó a él y tapó su boca, mientras él la observó con sorpresa—. Ni se te ocurra interrumpirme. La única razón por la que salí fue porque, por un pequeño instante, quería tener un algo de calma, y ya que por alguna razón mística dejaste de traerme aquí pensé, solo pensé, que por un momento podría salir a respirar sin ningún problema, pero al parecer estuve muy equivocada ya que llegaste aquí y sin preguntarlo asumiste que estaba escapándome, cuando obviamente no sería capaz de hacerlo, ni aunque pudiera.

Cuando Bella terminó de sacar de su sistema todo lo que había estado guardando, se percató de lo que realmente había hecho, soltó a Edward y comenzó a correr en dirección del castillo con la cara envuelta en llamas.

¿Cómo se te ocurrió hacer eso, Bella? —pensó—, ¿qué se supone que le diga ahora? Sus pensamientos fueron interrumpidos cuando sintió la mano de Edward tomando su brazo para detenerla, volteó sin observarlo, su vergüenza la hacía incapaz de verlo a la cara.

The Half Demon Prince [Fic]Where stories live. Discover now