Te Encontraré - Harry Styles

Capítulo 15 - El entrenamiento (primera parte)

Me metieron en un calabozo. Había muchas más celdas llenas de gente. Eché un vistazo a la mía al entrar. Había una chica de unos 14 años sentada en la cama mirando a la nada. Me acerqué a ella pero cuanto más me acercaba, más roja se ponía su cara. Me alegé de ellas del miedo que me entró. Me senté en mi cama y me puse a llorar. ¿Que había hecho yo para merecerme esto?

-No llores- dijo la niña- Me llamo Johanna pero todo el mundo me llama Choco.

-¿Choco?- pregunté confusa

-Si, es que me encanta el chocolate. ¿Cómo te llamas?

-Lucy

-¿Eres la Elegida?

-Sí...

-Lo siento, yo también lo fui pero me cambiaron ya que no estaban interesados en mí. Soy jóven y no me dieron clases así que no estaba preparada. Veo que me has sustituido.

-Lo siento, no era mi intención.

-Gracias, no quería ser la Elegida. Aunque tampoco quería acabar aquí.

-Choco, te prometo que saldremos de aquí.

Nos pasamos hablando durante horas. Nos estábamos conociendo mejor cuando un demonio nos dijo que era hora de dormir y teníamos que apagar las luces.

-Buenas noches- dije

-Igualmente- me respondió Johanna.

Estaban empezando a pesarme los párpados así que no me resistí y me dormí. Ni soñaba ni tenía pesadillas.

Llegó un momento de la noche en la que me desperté de golpe y una visión apareció:

2 3 9 11 23 573, te lo repito, 2 3 9 11 23 573. No volveré a repetirtelo pero recuerda esos números. Un día podrían salvarte la vida.

¿Qué significaban esos números? No sabía que hacer con ellos así que me los apunte en la barriga (ya que nadie me los vería allí) con un boli que tenía en el bolsillo. Me costó volverme a dormir pero después de mucho esfuerzo lo conseguí.

-Lucy...lucy- noté brazos sacudiendome

-¿Eh..?- dije dormida

-Soy Choco, ven corre- dijo sacudiendome más.

Me levanté de la cama y me estiré un poco. Me eché agua en la cara.

-¿Que quieres?- pregunté dormida

-No preguntes nada sobre le túnel, he estado aquí mucho tiempo, sígueme- dijo metiendose en un agujero que había escondido.

Yo la seguía sin saber a donde íbamos. Era un poco lioso pero después de unos cinco minutos vi varias luces. El agujero daba a una rejilla que estaba en la sala de los tronos. Estaban hablando de algo.

-Pues, hoy mismo empezaremos el entrenamiento de los presos para la guerra. Ganaremos. Todo va a ser nuestro. Dejaremos aquí lo que no necesitamos para que se pudra. Los presos que no puedan luchar se quedarán aquí. A y, Harry Styles también se quedará aquí. Él idiota ese se creyó que era importante- dijo el príncipe

Todos empezaron a reirse y a comentar sobre lo dicho. Harry iba a tener de su merecido. Después de pensar en que sería lo mejor para él pudrirse aquí me dio pena. Yo...yo le quería. No podía dejarle aquí.

-Vamos de vuelta- le dije

Volvimos a la habitación y me senté en mi casa. Me quedé pensando. ¿Se lo digo a Harry? No sabía que hacer. Le quería pero a la vez le odiaba.

-¡A desayunar!- gritó el carcelero pasando una barra de metal por todos los barrotes

Esperamos en la puerta a que abrieran la puerta. En escasos minutos llegó Harry y dijo que le siguieramos. Nos llevó a una mesa en la que sólo estábamos nosotros tres.

-¿Que pretendes, Harry?- pregunté- Nos apartas del resto ¿con qué fin?

-No sabes de lo que hablas- dijo Harry serio.

-Tú eres el que no sabe de lo que habla- dije refiriendome a lo de antes

-Lucy, se que estás enfadada y lo entiendo. Pero lo que no sabes lo que te amo. No se como pero acabé enamorandome de tí.

-Estoy por pegarte- dije enfadada- ¿Cómo te atreves a decirme eso?

-Es lo que siento- dijo soltando lágrimas

-No llores- dije seria- No te atrevas

-Lucy...y-yo te quiero

-Creéle- dijo Choco

-¿Por qué lo iba a hacer?

-No se, pero dice la verdad- dijo Choco

Terminamos de desayunar pero notaba que Harry me miraba muy amenudo. Le creía, no sabía porque pero le creia. Después nos mandaron a unas "clases" que en verdad eran entrenamientos para la guerra.

-Empieza tú- me dijo uno con él que tenía que luchar

-Empezamos a la vez, si no no es justo- dije

-Eres una chica, venga ya- me dijo.

-¿Así que eso dices eh?- dije empezando a luchar