12. Juntos

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JADE

—Bien, sonríe. —Hice lo que Matt me pidió mientras que sostenía el ramo de rosas.

Cuando mi amigo Matt me llamó para que lo ayudara con una de sus sesiones de fotografías, no dudé en ir. No tenía ni idea que estaría vestida de novia, pero la idea me llamó la atención una vez que estaba en el set.

Estaba acompañada por Chase, Maya y Diego, quienes miraban la sesión de fotos con una sonrisa. Simplemente la idea de imaginarme a mí algún día usando un vestido de aquellos hacia que mi corazón comenzara a acelerarse de la felicidad.

En la universidad estaba estudiando diseño de modas. Quería tener mi propia compañía de vestidos de novia y de otros tipos, me encantaba la idea de poder crear prendas con las cuales miles de mujeres serían felices.

Subí un poco mi mano haciendo que el ramo estuviera a la altura de mi boca. Sonreí mientras cerraba mis ojos, a lo que sentí el flash de la cámara. Sabía que las fotografías iban a quedar excelentes.

—Imagínate que es tu día. Recuérdalo, eres la novia más hermosa del mundo —me dijo, haciéndome sonreír mucho más.

Lo primero que hice fue visualizarme en un día tan especial como aquel. Me veía a mí con un hermoso vestido y mientras caminaba al altar de la mano con mi padre, lo veía a él. Chase estaba ahí, esperándome.

Esta vez mi sonrisa creció mucho más, no sabía que uno podía sonreír de aquella manera. Siempre me llevaba una sorpresa con Chase, y esperaba que de esa manera siguiera.

CHASE

Miraba a Jade mientras que ella sonreía a la cámara que Matt sostenía. Una sonrisa estaba en mis labios mientras que la miraba con una sonrisa.

Ella sería la novia más hermosa del mundo, no lo dudaba. Y lo mejor de todo era que sería novia, y de nadie más.

Cuando terminó la sesión de fotografías, todos nos dirigimos hacia mi casa, en la cual se encontraban todos los chicos debido al cumpleaños de la madre de Jade, mi tía Sara.

— ¡Feliz cumpleaños! —Abracé a mi tía con una sonrisa y ella besó mi frente.

A pesar de todo lo que había sucedido con mis padres, mis tíos no nos tenían un resentimiento a mi hermana y a mí. Sabían que nosotros no éramos responsables de las decisiones de nuestros padres.

Mi padre estaba conversando con mi tío Charlie. Él era el único de mis padres que había pedido perdón por sus actos. Me gustaba que mi padre era un hombre que sabía admitir cuando se equivocaba.

— ¿Qué sucede? —pregunté, cuando miré a Leslie discutir por teléfono.

—Nada, no te preocupes —Me aseguró, sonriéndome. Regresó al teléfono —. He dicho que no, y es no.

Salió de la cocina y suspiré con ambas cejas alzadas. Ella simplemente me sonrió y se alzó de hombros desde la puerta de la cocina.

El timbre de la casa sonó y rápidamente fui a abrir la puerta. Mi ceño se frunció al ver a una chica pelirroja delante de mí. Tenía una sonrisa de oreja a oreja y estaba con un vestido de flores.

—Hola, ¿se encontrará Leslie? —Me sonrió y me ofreció su mano para que la estrechara —. Soy Wendy.

—Un gusto conocerte Wendy, soy Chase —le sonreí.

Entró a la casa y pude ver cómo la cara de Leslie se decaía cuando la vio. Se acercó a ella y la saludó para que luego ambas fueran a la cocina a conversar. No entendía el por qué de la actitud de Leslie, pero no iba a preguntar.

— ¿Quién es esa mujer? —le pregunté a Nick, quien me sonrió.

—Ella es Wendy, hermanastra de Leslie —me explicó, a lo que yo asentí —. Ambas no tienen la mejor relación al parecer.

Me alcé de hombros con una mueca y caminé hacia dónde estaba mi novia. La abracé por detrás mientras disimuladamente miraba a la cocina, apreciando como Leslie y Wendy discutían entre dientes.

JADE

Entré a la cocina pero me detuve al escuchar a Wendy y a Leslie hablar sobre mí. Sabía que estaba mal escuchar conversaciones ajenas pero no pude evitar hacerlo, estaban hablando de mí al fin y al cabo.

— ¡No puedes meterte en esa relación, Leslie! —le escuché decir entre dientes a Wendy —. ¿Los has visto? Ambos se aman.

— ¿Lo harás o no?

En aquel momento caí en la cuenta de que ambas querían separarnos a Chase y a mí. Por supuesto que no lo iba a permitir, primero muerta.

—Bien.

Entré completamente a la cocina y ambas se callaron, me miraron con una sonrisa y trataron de actuar normal.

— ¿Sucede algo? —pregunté, fingiendo inocencia.

—Para nada, Jadeline —sonrió Wendy —. ¿Cómo es ser novia de Chase?

Sonreí superior. Iba a darles a ambas en donde más querían. Ellas tenían la intención de separarme de Chase, muy bien, yo les iba a dar en aquel plan.

—Querrás decir, futura esposa —sonreí, a lo que ambas abrieron los ojos —. Chase me ha propuesto matrimonio.

La cara de ambas decayó pero rápidamente se recompusieron. Sonrieron, fingiendo estar emocionadas.

Bien, les había dado en aquel punto de debilidad, y me sentía muy orgullosa de mí misma.

CHASE

— ¿Qué sucede, papá? —pregunté, mientras que miraba a uno de mis padres.

—Chase Sebastian Efron, no me hables así —dijo Maximilian, a lo que yo rodé los ojos —. Tu madre me ha comentado que estás con Jade otra vez. Los felicito.

Sonreí y él alzó ambas cejas. Mi relación con mi padre biológico estaba comenzando a ser una más cercana. Desde que me enteré de que no era hijo de Frank, traté de comunicarme con Maximilian mucho más, consiguiendo de recompensa y una relación padre e hijo.

— ¿Quién quiere escuchar a Chase tocar el piano? —Todos comenzaron a aplaudir a lo que yo miré a Sara con ambas cejas alzadas —. Un pequeño regalo de cumpleaños, cariño.

Reí y me acerqué al piano para comenzar a tocar. Recordé cuando era pequeño y Frank me enseñó a tocar el instrumento. Desde aquel momento, nunca dejaba de hacerlo, me había enamorado completamente de él.

Comencé a tocar con una sonrisa en mis labios, mientras que la mirada de todos estaba concentrada en mí. Jade me sonreía enamorada, a lo que yo le guiñé un ojo. Sabía que le encantaba cuando tocaba el piano.

Cuando terminé de tocar, todos comenzaron a aplaudir mientras que yo les agradecía con una sonrisa. El timbre sonó y fui a abrir la puerta.

Mis ojos se abrieron al ver a una mujer de cabello rubio ahí, mirándome con una sonrisa. Era hermosa, pero no la conocía.

—Hola, soy Stella.

Un Solo Destino ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora