La decisión estaba tomada.
-Iré, pero en la noche nos vemos ¿si? Pasaré por ti para cenar juntos-
Ella asiente.
-¿No me vas a acompañar al auto?- sonriendo un poco.
-si- sonriendo también -por supuesto- se va levantando y él la ayuda.
-Muchas gracias a todos por el buen momento, yo me tengo que retirar pero sigan disfrutando a la cumpleañera- le dice a los demás y al final mira a Isabel con complicidad, ella se sonroja -nos vemos- toma la mano de Isabel y entran a la casa para ir a la puerta.
-ya vuelvo- le dijo a todos antes de entrar. Una vez dentro se e abrazaron, salieron y se dirigieron al auto -¿como irás a los lugares? No traes auto- llegando al suyo y abriendo.
-no te preocupes, le digo a Mayte que me lleve al departamento- mirándolo, se muerde el labio inocentemente pero resulta ser muy sexy para él.
Estaba arriba de la camioneta, sentado, con la puerta abierta y ella ahí -ven a acá- la jala, acercándola lo más que puede a si mismo y así poseer su boca una vez más, en una forma avasallante y voraz, Isabel con mucho gusto corresponde dd a misma manera, llevando una mano a su pecho, estrujando apenas un poco la camisa.
Alguien los miraba por la ventana, sonriendo, feliz por la reconciliación de esa bella pareja, por fin, se dijo.
Se va separando poco a poco de la boca de su amado pues realmente necesitaban aire sus pulmones -wow- agitada -tendrás que darme muchos así en la noche para perdonarte que te vas.
Ríe un poco y respira profundo, estaba agitado también -yo con mucho gusto te doy todo lo que quieras- se lo dice en un doble sentido.
Ella sonríe captándolos pero en su mente solo piensa en algo doloroso "un hijo seria lo mejor" -más te vale, no quiero que te heches para atrás- le acaricia el pecho, en donde esta su mano -ya, cuidate y te portas bien- sentenciándolo con la mirada y sus palabras.
-yo siempre me porto bien- sonriendo se inclina y le da un beso tronado, también húmedo pero rápido -nos vemos en la noche, te amo- le guiña el ojo y enciende el auto.
-yo te amo a ti- le da otro beso, se hace a un lado y camina a la puerta, estando ahí se queda de pie, observándolo cerrar la puerta y marcharse. Ella entra y cierra la puerta pero no estaba sola, detrás suyo estaba la persona que momentos antes los había estado observando, su hermana -¡AY!- tocándose el pecho -me quieres matar de un susto, me asustaste... ¿que hacías ahí?- entecierra los ojos mirándola.
-quería confirmar lo que me imaginé... Y si... ¡ya hubo reconciliación!- grita emocionada.
-Mayte shhh, no grites... No te diré nada- sonriendo se dirige a la cocina.
-No te hagas, se te ve en la cara, tienes un brillo especial en los ojos, estuvo buena la fiesta- siguiéndola.
-que cara ni que nada, solo cenamos y me llevó serenata- sirviéndose en un vaso agua, al estar en la cocina.
Apoyada en la encimera, mirándola -que romántico ¿a donde te llevó?- expectante.
-a ningún lado, comimos sushi en el piso de mi sala, muy romántico ¿no?- algo irónica -bueno, la serenata si lo fue.
-¿y a que hora te dio ese anillo?- mirándolo -¿fue como cuando se casaron, en el sushi?
-no, cuando la serenata- mira el anillo.
-¿se van a casar de nuevo?- curiosa.
-Ay hermana, que chismosa eres- sonriendo -no, es algo meramente simbólico.