Reconoció la voz y enseguida sonrió -Hola negra ¿como estas?-
-Bien mi Ila- sonriendo también, al otro lado de la línea -¿como sigues tu preciosa?-
Soltó un gran suspiro -Pues ahí vamos, supongo que aprenderé a vivir sin mi pa' pero al menos ya no sufro tanto-
-Que bueno Ila, ya verás que poco a poco estarás mejor y bueno, se que no es un buen momento pero verás; Hector cumple años la próxima semana, pero pues por trabajo se lo festejaremos el sábado...- fue interrumpida.
-Fer... - sin muchos ánimos.
Ahora interrumpió ella -Espera, escuchame, te llamo para invitarte, si pero esta en ti ir o no, yo entenderé que no te gas ganas ni ánimos.
Suspira -esta bien, lo pensaré y ese día ya sabrás que decidí, si voy pues ya me veras sino pues no.
-Sale, que algas bien Ila ¿como sigues de lo demás?-
-pues... - recordó lo que pasó hace nada -ahí vamos- sonríe -te tengo que dejar Fer, quedé de verme con Mayte en media hora.
-Si, si Ila, igual yo tengo cosas que preparar, te llamo más tarde o mañana, te quiero-
-Yo a ti mi negra, adiós- colgaron ambas.
Ella se quedó unos instantes pensando si ir o no, bueno, suspiro ya lo pensaría más tarde, colocó en el piso a la perrita, fue a la cocina, buscó un traste y le luso comida y agua, era tan hermosa se dijo mientras la miraba comer y tenia que pensar en un nombre, de nuevo se dijo que lo haría después y fue a la habitación, a cepillar sus dientes, cepillar su cabello, retocar su maquillaje y demás.
Minutos más tarde ya iba en camino a casa de Mayte, escuchando musica mientras manejaba y llevando a su mascota en el asiento de al lado. Un poco más y llegó a casa de Mayte, se bajó con la cachorra en brazos después de apagar el auto, entró al edificio, subió al piso determinado y de ahí se dirigió al departamento de su hermana, tocó las veces necesarias para que supiera que era ella.
-Ya voy- se escuchó la voz de la rubia al otro lado de la puerta.
-Apurate que me hago pipí- gritó como normalmente lo hacia.
-ya- abriendo y enseguida viendo lo que Isabel llevaba en brazos -¿que es cosa? -hizo cara de desagrado pusa era pequeña y blanca, parecía una rata.
-Más respeto- dijo saludándola y entrando -es tu nueva sobrina- le sonrió sentandose en el sofá, mirándola.
Seguía mirándola de la misma manera -¿que es y de donde la sacaste?- sentándose enfrente.
-osea Mayte ¿como que, qué es?- sería -obvio es un perro... Bueno perra- sonríe -Y me la regaló José...-
Su cara cambio y hasta estiró su mano para acariciarla -Uy, eso suena muy... Bien- rió un poco -¿y a que se debió el obsequio?- cargando al ser peludo.
-bueno es que ayer, antier, ay ya no recuedo, hubo un robo en el edificio, el se enteró pues fue a verme con Lisa y se preocupo entonces me dijo que quería que tuviera compañía, aunque sea ella ya que no quiero que este el conmigo.
-ahhh y que más ¿que más ha pasado?- curiosa.
-¡Ay hermana!- suspira sonriendo -si estaba dudando de mi amor por el creeme, me esta enamorando de nuevo.
-¿por? ¿hizo algo más que regalarte esta belleza?-preguntó sonriendo sugestivamente.
-ahora si es una belleza ¿no?- río un poco y enseguida volvió a recordar todo ese día, desde que despertó -Bueno... Te cuento...-