Era mi mejor amigo... Tuvo que marcharse de la ciudad junto con su madre. ¿Por qué?, yo no podía entenderlo, era mi compañero de juegos, mi guardador de secretos y contador de historias... Te extrañaré Riley, vuelve pronto niño zanahoria.
Traté de...
- Bien chicas, se hace tarde y mañana tienen que grabar.- Diane recordó mientras se ponía de pie.
Dicho ésto, alguien tocó a la puerta, pensamos que sería alguno de los chicos que venía a molestar, Diane se puso de pie y abrió, el silencio se hizo presente...
- Dónde está -una voz masculina y seria-.
- ¿Qué haces aquí?, se supone que estarías en casa.- Contestó Diane, con una voz molesta y sorprendida.
- Dime, dónde está...
- ¿Algún problema Diane? -preguntó Joan-
- No, para nada... -regresó con nosotras acompañada-.
- ¿Qué?, ¿Raph?-Sentía cómo mis mejillas se volvían rojas...
- ¿Lo conoces?- Preguntó Emma, mientras me miraba a mi y después a mi hermano.
- Claro, es mi hermano mayor.
- ¿qué tan mayor?- Shanola puso ambas manos sobre sus caderas mientras pasaba todo su peso a una pierna.
- 27 años...
- Toma tus cosas, nos vamos... No tengo tu tiempo.- Me miró a los ojos, retándome.
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¿Qué?, simplemente no entendía nada de ésto, ¿Por qué estaba mi hermano aquí y me pedía que me fuera?, Teníamos un trato, me quedaba y le llamaba cada noche para hacerle saber que todo estaba bien. Algo aquí anda mal...
- No puedes llevártela así como así, tiene autorización de tus padres y de ti.-Alegó Diane.
- Cambié de opinión repentinamente... Nos vamos Aleena.
- No, yo me quedo. No me iré sólo porque tú quieres. Me dejaron venir hasta que terminen las vacaciones.- Crucé mis brazos, intentando no alcanzarlo y darle un golpe en la cara.
- No me hagas enojar Deborah, toma tus cosas y vámonos.
Desvié mi mirada a la puerta de entrada, seguía abierta y con algunos espectadores, y en primera fila, Cameron con una ligera sonrisa.
- Tú -señalé a Cam- ¿Cómo pudiste?, me las pagarás... Se supone que fue tu idea traerme para disculparte y ¿Ahora haces ésto?
- ¿Quién dice que fui yo?- Me miró mientras cruzaba sus brazos de forma burlona.
- No te hagas el inocente Riley, mi hermano no pudo encontrar los departamentos solo, le dijiste que viniera y le diste la dirección...
- ¿Eso es verdad Cameron?- Diane miró a su hijo algo sorprendida.
- Puede ser.
- Me las pagarás, en serio... Ésto es guerra Monaghan... Caíste tan bajo, tu disculpa duró muy poco, es imposible que confiara en ti después de tu maravilloso regreso.