cap 32

2.3K 206 18
                                    


capitulo 32: ¿amigo? ¿enemigo? ya ni se cual es cual...

Narra Shana

Al salir del refugio comencé a caminar a las zonas rocosas del lugar, rocas mas rocas me esperaban para ser completamente destruidas por mi.

Cuando llegue a esa parte del bosque ya no me quedaban dudas de que alguien estaba detrás de mi pero no se quien, y me da demasiada pereza meterme en su mente y simplemente no quiero luchar así que dejare que se deje ver el solo.

Cuando la quinta roca fue hecha añicos oí su risita a lo alto de uno de los arboles: un hombre.

- Bien eso fue asombroso, cada vez me das mas curiosidad - dijo. Me di la vuelta para ver quien era la persona quien me había hablado pero cuando me di la vuelta ya estaba frente a mi. Giro a mi alrededor y cuando llego detrás de mi agarro uno de mis tentáculos. Por la sorpresa di un respingo e hice desapareceros a todos - ¡Oye! ¡no seas aguafiestas! por cierto ¿como te llamas? - me gire para mirarle y pude ver como era. Cabello blanco, piel pálida y ojos negros, seria aterrador si no conociera a Eyelles o la Jeff. Fruncí el ceño y el rió. - ¿puedes hacerlas aparecer de nuevo? solo las veré - dijo y yo dude.

- No, seria raro - dije y el sonrió de lado. - me tengo que ir - dije y se le borro la sonrisa.

- ¿A donde? - dijo y yo suspire.

- No es tu problema - me voltee y comencé a caminar, parpadee y cuando volví a abrir los ojos el estaba frente a mi. Sabia que sacar mis tentáculos seria estúpido así que saque uno de mis cuchillos de la manga de mi sudadera sin mostrárselo, solo por si las dudas cuando el avanzo a mi, muy rápido y yo apunte el cuchillo a su cuello. El sonrió pero no me di cuenta cuando, al parpadear ya no estaba frente a mi, estaba detrás, con el cuchillo en su mano apuntando a mi cuello y mi brazo en mi espalda.

- Esto sera tan divertido - susurro en mi cuello pero una voz lo alejo.

- Yo que tu me alejaba, resulta que soy un hombre de lo mas celoso y te partiré en dos si no te separas de ella. Ahora. - ¡y el capitán Slenderman al rescate! Genial, esto no podría empeorar...


Narra Slenderman.

Me sentía jodidamente molesto con Shana, ¡¿porque cojones no se defendía?!

- O vamos, seria un desperdicio - dijo y en eso Shana suspiro y solo le codeo, pareo y quito el cuchillo, empezó a caminar en mi dirección pasándome de largo ignorándome la muy...

- Sera un honor verte de nuevo Lady Shana - dijo el sujeto y me miro mostrándome un mechónde su cabello, lo acerco a su cara en la cual estaba una sonrisa completamente descolocada. Olio el cabello y desapareció. Sentí la rabia cumularse en mi sangre y rápido camine hasta llegar a Shana. Ella caminaba tranquilamente y cuando le sujete del brazo ella no me miro.

- Suéltame - ordeno y yo sentí tanto coraje que solo atine a hacer algo. Le sujete de la cintura y la cargue a mi hombro.

- Si gritas o haces cualquier otro sonido te violare justo aquí Shana - dije y comience a caminar-

- O como si fueses a hacerlo , no eres mi padre - dijo y yo gruñí.

- No me tientes - dije y ella rió. Ese mero gesto me hizo estallar en ira y (solo un poco) de alivio. La baje y empuje acorralándola a un árbol pero aun así no me miro. - mírame - pedí y ella sonrió.

- No quiero - dijo y el alivio se fue a la mierda, el no tenerla conmigo me hacia una mierda en mi mente.

- Lo siento - susurre.

- Sientes que - dijo mirándome. Sus ojos mostraban la misma cantidad de tristeza, decepciona y rabia.

- Siento ser un adicto sin control, siento caer en un abismo cuando estas malditamente enojada o sentirme la mierda por ser quien te hace daño. Siento ser un maldito celoso posesivo que no soportaría que nadie mas te tocase, que te mirara o siquiera respirara cerca de ti porque lo único que quiero hacer ahora es besarte pero no lo haré si no me lo permites - puse todas mis cartas en la mesa. Ella solo me miraba sin decir nada.

- No era eso lo que esperaba que dijeras - dijo y yo me quede atónito... ¿que?

- ¿Y que quieres que diga? - en eso ella me empujo levemente y camino de nuevo. Pude ver que se sujetaba la mano así que tome su muñeca y ella resoplo. - ¿que demonios? ¿Shana, que mierda paso?

- Nada - dijo y yo fruncí el ceño. Tome sus muñecas. Ambas y le di un golpe en su pie haciendo que cayera en el suelo yo cayendo sobre ella sin darle oportunidad de moverse un centímetro.

- Te lo preguntare de nuevo, ¿que demonios te paso?




La Hija De Offenderman. 《Slenderman...》En Edición.Where stories live. Discover now