Volemos (yaoi) [ Haikyuu] [kagehina]

Capítulo 27 parte 1

En Tokyo, Kenma y Kuroo estaban en la pieza de Kuroo, Kenma jugaba en su teléfono y Kuroo leía un manga, la pieza de Kuroo era espaciosa, las paredes pintadas de un azul oscuro, su cama de plaza y media tenía un cobertor negro, los cojines eran blancos. Kenma sentado en cama se incorporó de golpe.

-    Atacaron mi aldea, me robaron 400.000 de oro y 350.000 de elixir y 2000 de elixir negro – dijo en tono neutro.

-    Kenma, Kenma - su tono fue cansado - deja esos juegos, no te hacen bien, pasas pegado y andas muy distraído.

-    Y a ti, ¿te harán muy bien esos mangas?.

-    Por supuesto, además no los leo mientras camino.

-    Jaque mate.

-    Oye en dos semanas comenzaremos en entrenamiento con los otros equipos, ¿sabes si karasuno vendrá?.

-    Le voy a preguntar a Shouyou.

-    Escríbele...

Kenma tomó su teléfono y escribió

-    Shouyou, hola, ¿vienen para la concentración?.

Luego de un minuto

-    Hola Kenma, yo creo que sí pero Takeda sensei no nos ha dicho nada aún – Kenma leyó en voz alta la respuesta de Hinata.

-    Avísame cuando sepas algo.

-    Claro

-    Estamos en contacto.

-    Bye.

Kuroo se recostó y apoyó su cabeza en el cojín, "ojalá vengas... Te estoy esperando".

Hinata iba en el tren cuando recibió el mensaje de Kenma, se alegró al escuchar que iba a haber una concentración, lo pasó bien la vez anterior y esperaba con ansias que se repitiera... Aunque... "Estaré todo el tiempo con ese... Y no quiero...".

Llegó en treinta minutos a casa de Yachi, ella le abrió de inmediato.

-    Hinata hola, pasa – abrió la puerta dejándole espacio para que entrara.

-    Hola Yachi san – se sacó el bolso y lo mostró – traje todo lo necesario, este fin de semana no hay escapatoria – sonrió mostrando sus hermosos dientes.

-    Que alegría que hayas venido, mi mamá nos dejó pastelillos y unas galletas, aunque me advirtió que no comiera mucho por las calorías – se cruzó de brazos haciendo un puchero pronunciado.

-    Yachi san tú estás bien, quiero decir que eres linda tal cual eres – Hinata lo dijo desde el fondo de su corazón, de verdad creía que Yachi era hermosa pero... El maldito pero, no le gustaba.

"Ojalá y fueras tú la persona que habita en mi corazón, eres todo lo que alguien podría querer:

eres linda, inteligente, simpática, agradable, risueña, divertida, sincera... Mmm tal vez me debería enamorar de ti..."

-    Gracias Hinata – agarró sus manos frente a su pecho y le regaló una sonrisa totalmente ruborizada.

-    ¿Estudiamos? – se sacó las converse y quedó en los calcetines de panda.

-    ¡Que lindos calcetines! – se acercó, agachándose frente a Hinata dijo – ¿puedo verlos?.

Hinata se crispó, no entendía qué era lo que Yachi quería, "acaso quiere que me los quite y se los pase, noooo, eso nunca, están transpirados, que vergüenza".