Mirror mirror [Camren]

Capítulo 14: Crueldad.

POV Camila

Y ahí estaba yo, por una vez en mi miserable vida yendo al instituto feliz. La noche con Lauren había sido mágica. No solo había confiado en mí para decirme todo, incluso lo del espejo, si no que dormirme en su pecho debido a sus caricias y despertar a su lado con aquella mirada verde confundida por las horas que eran fue totalmente indescriptible. ¡Incluso llevaba una sudadera suya al instituto! Siempre quise cumplir uno de esos clichés y a Lauren pareció gustarle lo feliz que me veía con una sudadera suya.

Mi padre una vez me dijo "Todo lo que viene, también se va" pero este sentimiento que me producía Lauren nunca podría irse de mí. Se había aferrado a mi corazón y se había grabado con fuego. Incluso si algo pasara nada podría hacer que perdiera mi felicidad.

Sé que está mal confiar toda mi felicidad en alguien, así uno nunca es autosuficiente. Pero nunca había conocido a alguien que conociera la soledad como yo, de hecho, Lauren llegaba a otro nivel, ella decidió esa soledad para ayudar a sus hermanos, para salvarlos. Yo tenía a Sofi y a mis padres que dentro de lo que cabía hacían que mi estancia en casa no fuera también un infierno. Lauren había puesto su deber como hermana por encima de sus gustos o deseos, la admiraba por ello. No muchos dejan de lado sus deseos por lo que creen que es su deber, era muy noble. Lauren era de lejos lo más parecido a un primer amor combinado con tu primera mejor amiga y con esa figura sabia y filosófica a la que admiras. Mi ojiverde era increíble.

Fui al vestuario a cambiarme para Educación Física. No odiaba la asignatura ya que no se me daba mal por mi delgadez y el buen fondo que tenía gracias a huir siempre de ciertas dos, las mismas que se habían propuesto dejarme moratones mientras jugábamos al balón prisionero. Todos los golpes iban hacia mí, pero mi agilidad estaba desbordada ese día. Esquivé todos los balones y hasta conseguí eliminar a Dinah dándola en toda la cara con el balón. Mi equipo ganó, y no me iba a tirar flores, pero era gracias a mí.

Cuando salimos el profesor me llamó por lo que me retrasó un poco. Hablamos de lo bien que estuve hoy y por la charla noté que se había percatado del complot de ambas chicas para dejarme K.O. También se preocupó por mis marcas del labio y de la ceja y yo esquivé el tema como pude. Cuando entré al vestuario a cambiarme estaba sola. Suspiré aliviada ya que no me sentía cómoda con Dinah o Normani cerca de mí después de lo de hoy. Me quité la ropa quedándome en ropa interior y fui a mi taquilla de la sala donde había guardado todo. La taquilla estaba abierta y totalmente forzada, el candado incluso estaba roto. Me aferré a la ropa que tenía en las manos y pensé en ponérmela rápidamente cuando me quedé paralizada.

Un escalofrío recorrió mi espina dorsal cuando oí risas detrás de mí. Me giré y vi a ambas chicas con mi ropa en la mano. Me fijé en la sudadera de Lauren arrugada entre sus manos y solo pensé en recuperarla pero esto olía a problemas desde lejos y no sabía si correr, gritar por ayuda o ser una luchadora y enfrentarme a ellas. Al fin de al cabo ellas siempre salían impunes de todo, la última paliza que me dieron les costó una expulsión de 3 días y por tranquilizar a mis padres, puesto que no había pruebas suficientes contra ellas y se había realizado fuera del recinto y horario escolar.

Cuando intenté ponerme la ropa rápidamente ambas se acercaron y me pegaron contra los casilleros quitándome así la ropa de las manos. Sentí en mi espalda el frío de las taquillas y el dolor de clavarme algunas de ellas. Me quedé resintiéndome unos segundos con los ojos cerrados.

-Si la quieres, ahí va - Dijo Normani tirándo la ropa en una de las duchas individuales que había. Vi como todo se mojaba un poco con los restos de agua que quedaban en aquel suelo mohoso, cada vez sentía que esto era una broma sacada de una película típica de adolescentes americanos.