Addicted To Chaos [Re-subiendo]

Capítulo 5

  *Dave*

Lo había hecho para que esos tipos no le hicieran nada, pero, después de unos días comencé a darme cuenta de que no había sido sólo por eso. Podría perfectamente haberle dicho que la esperaba para unas cervezas, o tirarle la guitarra y decirle que fuesemos a tocar, pero no. Hice otra cosa.

Metallica es nuestra banda, y me encanta, es sólo que...hay algunos problemas.
No es que no pueda controlarlo, pero tengo una pequeña adicción a las drogas. No creo que tenga nada de malo, la verdad. Pero a James y Lars les molesta demasiado. A Cliff no le importa y en cierto modo está bien. Tampoco lo conozco demasiado, porque no vivíamos aquí. Y teníamos a otro bajista. Los chicos me culpan de que se fuera, pero no es asunto mío. Si no le gustaba cómo actúo entonces que se joda. Además, si vinimos fue porque Cliff quiso, y los chicos son unos chupabolas, no me vengan con que no.

Veía a Lisa todos los días, y era imposible no fijarme en ella.
Después de lo del Sábado todo siguió igual. Nos ignorábamos y discutíamos a ratos. No volvimos a cachetearnos ni tirarnos al suelo y golpearnos mutuamente. Porque no quería levantar más sospechas. Y porque James me mataría.

Volví al departamento, no habíamos ensayado desde que Lisa vino, no se qué mierda sucedía, pero no habíamos ni tocado el tema.

Lars sólo quería hacerse famoso rápido, James buscar y buscar contactos por todas partes, yo me desesperaba perdiéndome en cualquier lugar para no pillarme con Lisa. Y es por eso que creo que sucedió lo que sucedió con Cliff, que era el que estaba fuera de mi "vigilancia".

Llegué al departamento buscando drogas para vender, y dinero para poder pagarlas. Había una chica con la que tenía un trato y me acostaba con ella. Pero de todas formas necesitaba dinero.

Obviamente ni me fijé quién estaba, me valía verga, siempre entrabamos aunque cualquiera estuviese en medio de un revolcón con una chica, daba igual, todos nos habíamos visto, pero nunca me había sentido como ahora.

Si, estaba bajo los efectos de no sólo la marihuana, sino de muchas mierdas más que eché en el porro.

Escuché leves gemidos, algunos sonidos, y vi la chaqueta de jeans de Lisa, la del parche de Misfits, nadie más tenía esa chaqueta.

Tirada al lado una camiseta con estampado de la misma banda. Y esa la usaba Cliff. Porque a Lars no le gustaba, a mi tampoco, y a James no le cabía ni en un brazo.

Con la adrenalina me tiré contra la pared y prendí la luz.

Claro que eran ellos....tapados con una sábana vieja. Se translucían las piernas de Lisa, abrazadas contra la cadera de Cliff, que tenía la espalda brillante de sudor, las manos de la chica agarradas de ella por debajo de esos brazos que se apoyaban sobre sus hombros. Levantó su cabeza, por el cuello de Cliff. Su rostro brillaba y sus ojos estaban brillantes también. Cuando me vio se desfiguró, y entonces mi compañero de banda, a quien creí un hombre medianamente derecho, volteó la cabeza y simplemente me quedó mirando. Se sentó, ni siquiera alcancé a fijarme en el torso desnudo de Lisa, porque salí corriendo, y casi saqué la puerta de un tirón.

Todo había pasado en menos de seis segundos, pero pude fijarme en un millón de cosas.

Cliff siempre fue el tipo al que todos querían. Wow qué gran tipo, miren cómo es de derecho.
James lo dijo cuando estábamos todos presentes y medianamente sobrios. Hasta yo entendí. Está prohibido cualquier contacto de tipo sexual con Darrell. Yo lo rompí, porque yo siempre rompo las reglas, pero...¿Cliff? Nah, por favor.

Caminé rápido todo el tiempo, hasta salir del edificio. ¿Cómo fui tan imbécil? debí habérmela tirado esa misma noche, de seguro me deja, es una chica preciosa, y la odio, porque...porque no sé.