Yo os declaro;

943 84 14
                                    

NICO POV

Estoy jadeando, apenas puedo respirar. Esto es demasiado ejercicio físico, de echo, creo que jamás había corrido tanto. Llevo siendo perseguido por esos dos maniacos casi dos horas. ¡DOS! Está claro que tengo que hacer mas deporte, buf, que calor.

Pero supongo que merece la pena total y absolutamente por ver reír a Sophie.

Y de salvar la vida, claro, pero sobre todo de hacerla reír.

Se pone preciosa cuando se ríe, su rostro se ilumina, sus ojos brillan, y sus mejillas se ruborizan, lo cual es adorable.

Y yo aquí corriendo aún, hace un rato que dejé de oír exclamaciones cuando pasaba corriendo, ya que hemos dado como siete u ocho vueltas al campamento. Una chica de la cabaña de Afrodita me ha silbado y sus amigas me han gritado que estoy buenísimo cuando sudo. Luego ha propuesto algo que ni siquiera puedo nombrar. Me dan escalofríos. ¡Por dios! ¿Con esa boca le habla a su madre?

-¡Nico, ven aquí! - Percy, que se cree que aún tengo diez años, me lleva todo el rato gritando que no me harán daño. Seguro. - ¡No queremos hacerte daño, solo queremos hablar!

-¡NUNCA ME ATRAPARÉIS!

Parezco un poco loco, pero es que creo que me estoy deshidratando. Justo cuando creo que he visto a una mula vestida como Michael Jackson cantando, oigo un grito;

-¡Nico, VIAJE SOMBRA! - por supuesto, esa es Sophie. Y, por supuesto, a mí no se me había ocurrido. De modo que me transporto hasta ella.

Por fin un poco de paz y tranquilidad, madre mía. Me siento en una roca en plan casual, pero sé que a Sophie no la engaño, sabe que no puedo con mi alma. Pero por lo menos ya casi no oigo los gritos de Jarcy, si, he decidido llamarlos así, porque se complementan muy bien a la hora de dar caza a posibles pretendientes de su "Little sis". Demasiado bien. Sospecho que no ha sido la primera vez.
Pero eso da igual ahora, por fin tengo un descanso.
Que paz y tranquilidad.

Sophie se sienta a mi lado.

- Uau, parece que me ha tocado la lotería contigo, encima de guapo y alto, deportista. Estoy empezando a pensar que solo te falta cerebro- me dice entre risas.

- Ja ja, ¿Ves que me ría? - ella asiente, y yo solo puedo darle la razón, porque si que me estoy riendo.

Como sé que esto no durará mucho, y con esto me refiero a la falta de Jarcy, saco un par de esqueletos de la tierra para hacer de protectores, aún llevan la ropa con la que murieron, y sus ojos son solo cuencas llenas de gusanos.

- Escoltar, nosotros.

Hay que hablarles así, si no, no lo captan. Son un poco cortitos, la verdad es que puede, y solo puede, que sea porque no tienen cerebro. En serio, no tienen.

Sophie no parece alterada, al menos no mucho.

Eso me perturba un poco.

- ¿Nos vamos, Nico?

Lo estoy flipando.

- Claro- y le tomo la mano. Ella se ruboriza y me sonríe, y yo me siento... Completo. Por primera vez en mucho tiempo.

Nos llevo por viaje sombra a mi cabaña, porque me da miedo ir a la suya y que papi Zeus y big bro Jason quieran hacer hijo de Hades a la plancha.

Los soldados-esqueleto nos siguen.

Es una posibilidad mas que probable.

- No pensaba que Jason fuera capaz de correr tanto- bromea Sophie después de sentarse en mi mesa de ébano, no sin antes tumbarme en la cama, porque a mi me han dejado de funcionar las piernas, la verdad.- Quiero decir, ¡Pero sí no es capaz de levantarse para coger sus gafas! ¡Las levanta en el aire por pura vagancia!

Yo río a carcajadas, no me extrañaría nada de nada.

-¿Te extraña que Jason pueda correr tanto? ¿Qué me dices de Percy? Ese tío duerme dieciséis horas, y eso solo porque Annabeth le obliga a levantarse y dejar de comer dulces.

Ahora nos reímos los dos, yo bastante menos que ella, pero es que parece que esté a punto de morirse atragantada con sus propias carcajadas.

- Venga...- dice ella limpiandose una lágrima de risa- Ya pasó.

Aún se ríe por lo bajo, y yo me quedo embobado mirándola. Dios, que suerte tengo. Es perfecta.

Antes de que pueda refrenarlas, las palabras salen de mi boca en un claro tono soñador;

- Te quiero.

Deja de reírse y me mira fijamente. A mi me entra miedo.

¡Mierda! ¿!Qué he echo?¡ ¿Y si ella no me quiere? ¿Y sí...?

No me da tiempo a pensar nada más, porque de repente estoy rodeado por unos bracitos que apenas me alcanzan.

-Yo también te quiero- me contesta con los ojos llorosos y los rubios cabellos saltando.

Yo doy un salto de alegría, y levanto el puño en señal de victoria.

¡Vamos! Nico- 1- Mierda de vida- 0

Le devuelvo el abrazo y nos quedamos así. En ese momento me doy cuenta de que daría lo que fuera por protegerla.
Secaría el océano, desataría el infierno y saltaría al abismo solo por verla feliz. A salvo.

Bien.

-----------

Hola, siento haber tardado tanto en publicar.

Me gustaría que votarais y comentarais lo que os parece la historia hasta ahora.

Os tengo aue recomendar un libro: Te daría en mundo.

En serio, es genial. Si alquien se lo ha leído estaré mas que encantada de intercambiar opiniones.

Muchísimas gracias por ser tan buenos lectores, ¡YA LLEGAMOS A LOS 2k! Os quiero, de verdad, a todos los que os tomasteis un momento para pasaros por mi historia.

Besitos de sombras.

Os quiama, Magic_In_RedBicicle.

Before the after... (Nico di Angelo) Where stories live. Discover now