Capítulo 9.

1.8K 191 78
                                    

Capítulo 9.


Lo último que recuerdo con claridad fue la mueca sorprendida y desconcertada de Claire al marcharse, sin dejar de mirarme ni por un segundo. También recuerdo a Harry, diciendo o preguntándome cosas, llamándome por mi nombre falso sin obtener respuesta alguna de mi parte.

Mi cuerpo estaba ahí, sin embargo mi mente había viajado a lugares que ni siquiera yo conocía, mis pensamientos y sentimientos estaban dándome vueltas, revoloteando y gritando por todo mi cerebro, podía sentir la guerra que existía en mi cabeza en estos instantes.

Lo único que quería era largarme de ahí, pero no quería volver a Pinewood, no quería volver al piso del apartamento, no quería volver a los cines, no quería volver con Harry y no soportaba estar un segundo más ahí. Quería desaparecer o simplemente desvanecerme, quería dejar de existir en ese mismo instante, pero para mi extraordinaria mala suerte nada de eso sucedería, o al menos no hoy.

Por unos dolorosos y largos segundos me imaginé, me imaginé hace cuatro meses, cuando Tamara Rivers aún existía, cuando mi más grande preocupación era no reprobar el examen de Física, cuando podía salir de fiesta con mis amigas, cuando aún estaba viva, porque esto sin duda alguna no es vida.

Me sentía muerta en vida, y no creo que exista algo peor que eso.

Un jadeo me hizo regresar a la realidad.


—¡Respóndeme! —alcancé a escuchar después de que una mano bastante grande se apoderó de mi brazo.

—¿Q-qué? —pregunté en un susurro apenas audible.

—¿Acaso haz escuchado algo de lo que he dicho estos últimos cinco minutos? —su voz era diferente, era dura, tosca y agresiva.

—Quiero irme, quiero irme ahora —pronuncié con un ligero toque de desesperación.

—¡No nos largamos a ninguna maldita parte hasta que me expliques qué mierda está ocurriendo! —espetó a la medida que afianzaba su agarre, negándome cualquier posibilidad de soltarme.

—¡Suéltame! —grité exasperada.

—No hasta que me respondas —ordenó tajante.

—¡Quiero irme ahora, Harry! —supliqué una vez más, esperando algo de éxito esta vez, sus facciones se suavizaron un poco, sin embargo no me soltó.

—¡Bien! ¡Nos vamos! —la voz sarcástica de Harry me hizo estremecer.


Él me jaló, literalmente, fuera de la feria y juntos nos encaminamos al auto.

El día había acabado y se había llevado la luz consigo, dejándonos la oscuridad de la noche, pero los pequeños y altos faros se encargaban de iluminar las calles bastante bien.

Empezaba a preguntarme cuando llegaríamos al auto cuando éste apareció en mi campo de visión, logrando sacar un suspiro de mi boca.

Al subir al auto los dos nos quedamos en silencio, yo no tenía ni tantitas ganas de compartir un segundo más con él, no quería tener que darle explicaciones, además ya era bastante obvio que algo ocultaba al no negarle a él la confusión de la chica, que en realidad no era una confusión, maldita seas Claire.

Harry se puso en marcha y en menos de lo que creí ya nos encontrábamos en la solitaria carretera.

El silencio que nos inundaba era muy incómodo. Sin mencionar lo asustada e impotente que me sentía en estos momentos, ¿es que acaso nunca me sentiré en confianza de nuevo, esto es permanente?

Fue hasta el momento en el que Harry aparcó el auto a un costado de la carretera que pude bajar la vista y observar mis manos, éstas se movían sin control alguno, temblaban y no podía hacer nada para detenerlas.


Obsession| h.sDonde viven las historias. Descúbrelo ahora