Cien y Una Historias [OneShots]

Nishinoya [1]

Tener que buscar un modelo para dibujar puede ser cansado, pero ese es el proyecto de la semana en el club de arte. Un dibujo de una persona, un dibujo de una persona...

Lo único que le queda es esperar que alguien se pose frente a ella y se quede ahí por mucho tiempo, aunque duda que eso pase si está sentada en un pasillo abrazando su portafolio de manera depresiva.

Conoce a bastantes personas, la mayoría de primero y segundo, pero ninguno le parece estéticamente lindo para plasmarlo en papel. Quizás si se va a meter a los clubes de deporte, ha escuchado de sus compañeras de salón que los jugadores de algunos deportes tienen cuerpos increíbles y que muchos son muy guapos.

Suspira y se levanta. Está decidido, se dará una vuelta por los clubes a la salida en busca de alguien a quien dibujar. Siendo mitad de la semana si no encuentra a alguien tendrá que pedírselo a un amigo; mientras camina se pregunta por qué la suerte la tuvo que obligar a sacar masculino y no femenino, tiene amigas muy lindas y que dibujarlas sería gratificante.

En lo que queda de las clases garabatea un intento de dibujo en la última hoja del cuaderno de historia, a ella no le interesa mucho lo sucedido en Francia hace bastante, pero después sacará toda la información necesaria de los libros de historia para no reprobar el examen que se acerca.

En cuanto suena la campana comienza a guardar todo, no tiene tanta prisa, después de todo, los clubes no se moverán de su lugar. Repasa los clubes deportivos que existen y con ello en su mente comienza a caminar fuera del salón.

Primero se da un paseo por el club de tenis, pero ninguno capta su atención. Es así hasta que se decide por el último club, que no tiene una gran cantidad de miembros en el equipo. Y está lista para darse de cabeza contra la pared si no hay una simple persona que capte un mínimo de su atención, se está frustrando; ella no quiere recurrir a la única persona, con la que solo ha hablado una vez, para ello empezando porque ni es de ahí.

Asoma la cabeza para ver la práctica del club, lo primero que capta su atención es un chico de cabello naranja que salta muy alto dejándola con la boca abierta. Nunca había visto a alguien jugar voleibol, pero está segura que ese salto no es normal para alguien con su estatura.

Cuando quita la vista del pequeño cambia para buscar a otro, el chico que levanta el balón se ve queriendo intimidar la pelota por la mirada que sostiene. También está uno de segundo, a ese recuerda haberlo visto una vez haciendo escándalo en el aula de a lado cuando iba pasando por ahí; él resalta por su falta de cabello.

Repasa a todos los jugadores, es como si todos los más peculiares de la preparatoria se hubieran venido a meter al club de voleibol. Peculiares porque podría dibujar a cualquiera de ellos, todos son estéticamente lindos, podría venir aquí cada que necesite modelos porque hasta las dos managers del equipo son lindas.

—¿Se te ofrece algo? —Da un brinco al ver a una de las managers hablarle.

Sonríe buscando las palabras que se fueron corriendo sin ella.

—S-Solo estaba viendo.

—¡Lamento llegar tarde! —Medio vuelve a ver al chico que está entrando en esos momentos, una gran sonrisa y un mechón rubio. Sí, todos ahí tienen algo que los hace diferentes de todos y no tiene que ver con ser el más pequeño de todo el equipo.

Ya está decidido a quien dibujará. Ahora solo debe acercarse a alguien de ese equipo para preguntar el nombre y pedirle el favor, si, su plan es increíblemente fatal.

Mira a la manager que se mantiene a su lado.

—Disculpa, ese chico que acaba de entrar, ¿cómo se llama?

—Yu Nishinoya, ¿te interesa él?

—¿Ah? —AL principio no capta el significado, pero al ver la sonrisa amable y la forma en que la ve si lo hace, y se pone a negar mientras retrocede, cayendo sentada en el suelo.

—¿Estás bien?

—¡Sí! Muchas gracias, tengo que irme.

Y sale huyendo con la intención de esperar afuera al chico, pero lo más seguro es que se vaya con los del equipo y le dará vergüenza acercarse. No es tan valiente para ello.

Se va a su club a mostrar su inexistente dibujo, seguro todos están ahí haciendo otras cosas, pero ella simplemente se ha bloqueado al no encontrar un modelo, y aunque haya visto al perfecto pasar cerca de ella no puede acercársele si están todos sus amigos. Entra al salón y saluda a todos, disculpándose por tardar. Se va a su puesto y comienza a hacer bocetos de lo que vio en la práctica de voleibol.

Al final si termina dibujando algo, pero no le sirve para el proyecto de la semana, a pesar de que si es una persona real.

El chico de cabello naranja dibujado en el momento en que ha saltado, coloreado a blanco y negro. Le gusta cómo le ha quedado, así que irá a su carpeta especial de dibujo. Esa en donde están solo de los que de verdad está orgullosa, porque hay otros que no los considera tan buenos.

A la hora de regresar a casa, luego de haber terminado las horas de club, camina con la vista baja pensando en acercársele mejor mañana en algún descanso.

Pero la suerte hoy si está de su parte y tropieza con él justo cuando empezó a caminar con la mirada al frente y distraída totalmente, Nishinoya está sentado con las piernas alargadas esperando a los demás del equipo. Al ver que la chica casi estampa la cara contra el suelo, pero que no pasa por poner ambas manos en el suelo, se levanta para disculparse, un tanto alarmado para ver si está bien.

—¡¿Estás bien?! ¡¿No te lastimaste?! ¡Lo siento mucho!

—Estoy bien... —se queda en silencio, viendo que está es su oportunidad—. Necesito un favor tuyo.

Dejando de lado el dolor de sus manos hace una reverencia en petición, si le dice que sí será muy feliz.

—¿Qué clase de favor? —Se pone en cuclillas frente a ella, en espera de lo que dirá. Le ha parecido gracioso ese abrupto cambio; es la misma chica que estaba viendo la práctica cuando él llegó. Es muy bonita.

—Quiero que seas mi modelo para un dibujo; todas las semanas se hace un proyecto en el club de arte, una forma de imponernos retos. Si no quieres yo entenderé.

—Está bien. Será un gusto modelar para ti.

Ella sonríe agradecida aguantando las ganas de gritar y abrazarlos.

¡Y tenemos a Noshinoya! También con segunda parte(?). Al fin pude escribir esta primera parte del oneshot, me costó que se me viniera algo a la mente para él xD Ahora sigue Ennoshita...otro que no se como rayos haré :v si...los que siguen son un reto...excepto Iwa-chan~ ese es un amor que no necesita pensarse tanto(?)

En fin, espero les haya gustado.

PD: Si gustan pueden pasar por mi concurso, tiene algunos personajes de Haikyuu y de otros animes. Son bienvenidos, hay mucho tiempo para escribir :)

¡Gracias por leer!♥