¿Será...? (Fanfic Percabeth) (En Edición 54/89)

Capítulo 37

Annabeth PoV:

De seguro se preguntarán cómo diablos terminamos en una brutal pelea de almohadas. ¿Recuerdan cuando Thalia dijo eso de la diabetes y las caries? Tendrían que, porque yo le arrojé una almohada en la cabeza, el problema es que ella me lo devolvió y me sacó la lengua, y eso es una declaración de guerra, nadie se mete con Annabeth Chase y sale ileso en el proceso.

La cosa es que yo volví a pegarle con más fuerza en las piernas, y cómo estaba de pie, se cayó sobre su trasero a lo que yo me reí como una maniática, ella se enfadó y el resto es historia.

Cómo en unos 5 minutos en los que ambas terminamos con arañazos por las almohadas, escuché que la puerta se abrió, supongo que serán los chicos. Aunque eso no me detuvo, si Percy quiere estar cerca mío, debe aprender que no cambiaré por él. 

Al parecer si eran los chicos, porque después de que entraran, sentí otro golpe de almohada en mi espalda, era Jason, lo golpee de vuelta, y nuestra guerra se agrandó y se volvió menos violenta, ya estábamos soltando carcajadas entre nosotros. De reojo pude ver a Percy sentado viéndonos, riéndose de nosotros y comiendo palomitas.

Maldito infeliz, debería estar ayudándome, no riéndose de mí, pero no importa, ya me vengaré de él.

Le hice una seña a los chicos para que vean a Percy, al parecer lo comprendieron porque se abalanzaron contra él con todas las almohadas que fueron capaces de sostener, fue mi turno de reír, hasta que escuché...

-Annabeth Chase, no deberías reírte de mí, soy tu novio.- Le saqué la lengua y los Grace pararon de golpearlo.

-Pues yo también soy tu novia y también te reíste de mí.-

-No me reía de ti, de ellos sí.- Señaló a mis amigos.

-Pues yo soy tu amigo, tampoco deberías reírte de mí.- Le reclamó Jason.

-Touché. Lo siento, para los tres.- Se rindió Percy, mientras los demás arreglábamos el destrozo que hicimos. -¿Les ayudo?-

-Si quieres.- Dijo Thalia. -Tenemos una regla entre los tres, si desordenas o rompes algo, lo debes arreglar. Pero no es necesario que ayudes.-

-Pero quiero hacerlo. Mi madre me enseñó a ayudar a toda dama que se me cruce en mi camino.-

-Gracias Percy, eres muy dulce.- Dijo Thalia.

-Lo decía por Annabeth.-

La cara de mi amiga valía millones, estaba con la cara roja de rabia y lo miraba como su quisiera matarlo, Jason y yo soltamos una carcajada. Aún más cuando Thalia comenzó a golpearlo.

-Ya basta Thals. -Intervine. -Ya pagó su condena déjalo.-

-Sólo esta vez Jackson, a la próxima no estará tu noviecita para ayudarte.- Le amenazó.

-No debería escuchar eso.- Dijo Jason. - Eres un hombre, se supone que debes defenderte tú sólo.-

-¿Qué parte de ya cumplió su condena no entendieron?- Pregunté sentándome a su lado.

-De acuerdo.- Dijeron al unísono. -¿Qué película quieren ver?-

-Y así le temen a los enanos.- Susurré.

-¿Siempre son así?- Preguntó Percy.

-Rara vez, pero debes acostumbrarte, los gemelos son peores.- Aclaré.

-Es en serio, ¿qué vamos a ver?- Preguntó Thalia.

-Una de terror.- Sugirió Percy, todos estuvieron de acuerdo, menos yo, odio las películas de terror, pero eran 3 contra uno, no tenía posibilidad de ganar. Así que acepté de mala gana.