Estaba acostumbrada a recibir toda clase de insultos, pero éste se pasaba.
Decidí ignorarlo, pareciera que realmente quería sacarme de quicio.

- ¡Y ve a pedirle disculpas a la ramera que te parió! - Gritó antes de cerrar la puerta de un puto portazo.

Apoyé la cabeza en la pared del pasillo durante un momento, tratando de calmarme, pero no podía. De un momento a otro sentí que mi sangre se calentaba y un impulso llevó a mis manos a tocar de nuevo a la puerta de esos chicos.
Por suerte quien abrió fue el colorado, porque apenas vi su forma asomarse, lo hice volar de un puñetazo.

-¡Perra inmunda! -gritó lanzándose al pasillo y acorralándome en la pared.
-¡Suéltame! -grité empujándolo.
-¡Mal nacida! -respondió con un empujón que me hizo perder el equilibrio y golpearme la cabeza en el suelo.

Me quedé ahí, sintiendome mareada por el golpe. Hasta que escuché una voz.

-¿Qué mierda? ¿Dave? ¿Lars? Cliff?  ¿quién es...ella?
-¡Qué te metes! es algo entre ésta zorra y yo.
-Ya te metiste en mierdas. ¿Qué pasa contigo Mustaine?
-¡Déjame, Hetfield!

Hetfield. Levanté la cabeza y al principio no estaba segura hasta que lo vi bien. Sí. Era él.

-¿James?  -dije insegura.
-¿Qué...?-dijo Lars.
-¿James? ¿La conoces? -dijo Cliff.
-¿Es alguna ramera del barrio? -comentó estúpidamente Dave.

El rubio me miraba extrañado. Me puse de pie y traté de acomodar mi cabello, quitándolo de mi cara.
Él puso los ojos como un chino, y luego los abrió como dos bolas azules.

-¿Lisa?
-¿Hetfield?
-¿Abbott?
-¿Eres tú?
-¡No lo creo!¡Eres tú maldita desaparecida!
-¡Sí!
-¡Ven aquí y dame un abrazo!

James Hetfield y yo fuimos compañeros de escuela durante poco más de dos años. Nos hicimos amigos y luego nos separamos, pero nos queríamos mucho. Volver a verlo fue lo mejor.

-Te he extrañado.
-Y yo a tí.

Me separó de él pero me mantuvo sostenida de los brazos. Miró a Dave.

-¿Por qué la golpeabas imbécil?
-¡No la golpee, se cayó sola, ella se lo buscó!
-¡Cállate rata! -le grité.
-Perra...-susurró.
-Lisa me golpeó hace unos minutos, pero nos disculpamos y está todo bien. -dijo Lars.
-Ah y por eso estaba agarrandose a trompadas con Dave.
-Dave es Dave...-dijo Cliff.
-¡Ya! ¿Qué tienes que ver con la indeseable? -dijo el maldito desgraciado
-Ten cuidado Dave -dijo abrazándome. -hablas con mi mejor amiga. ¿O no, Liz?
-¡Claro!
-No puedo creerlo.
-¿Qué no crees, Mustaine? no seas amargado.
-Vayanse a la mierda. -dijo entrando.
-¿Cómo carajo se conocieron? -dijo Lars.
-Qué chico es el mundo -dijo Cliff.
-Bueno chicos, larga historia, les cuento después...creo que deberíamos ir a dar una vuelta ¿no crees? tenemos mucho que hablar.
-Sí, vamos.

Caminamos mientras compartíamos unos cigarros y cerveza.

-¿Qué haces aquí, Isa?

James tenía mil formas de llamarme:
Lisa, Liz, Isa y así, pero como más me decía era Isa, y eso lo hacía especial.

-Vivo ahí, al lado tuyo.
-Ah...creo que por eso no te habíamos visto. Llegamos hace poco.
-Ah...
-Aunque creo que ni pasas en casa ¿no?
-No mucho.
-¿Has estado mal?
-Escapando, como siempre.
-Mierda.
-Estoy angustiada, no puedo dejar de consumir drogas y no puedo evitar meterme en problemas. Lo he intentado, pero ese amigo tuyo, Dave, me hizo perder la razón.
-Dave es así....-dijo mirando el cielo. -él lo lleva todo al límite. Me preocupa.
-Pero es... apático, se enojó demasiado por lo de Lars, y yo me disculpé y me lo aceptó y hasta nos dimos la mano.

No dijo nada.

-¿Quienes son ellos? -dije después de un rato.
-Son la banda. -me respondió.
-¡James! o sea que...
-Si, cumplí mi puto sueño.-dijo sonriendo.
-Me alegro tanto  James -dije mientras lo abrazaba

James quería ser guitarrista y yo soñaba con tocar el bajo como los grandes maestros.
Él lo logró. Lo que es yo...aún intentaba estabilizarme emocional y físicamente.

James me abrazó. No nos veíamos hace años y quizás me atraía como en ese entonces, pero prefería que fuesemos sólo amigos. Y en el fondo él también. Además, me pasé pensando en ese chico Cliff, y matándome por haber seguido golpeando a ese tal Dave.
Volvimos al departamento, pero en el camino, de ebrios nos perdimos y terminamos en cualquier lugar, pasando el día entre tragos, risas y porros.

Volvimos a la siguiente noche y cuando doblamos hacia el pasillo, nos encontramos con todas mis cosas afuera, y un cartel que decía "desalojado".

-¡Mierda!
-¡Te echaron?
-Llevaba meses en deuda, por la mierda.
-Vamos Isa, mmmh...yo te ayudo.
-¿Cómo?
-Quédate con nosotros.
-Ni loca Hetfield, ¿Tienes semen en el cerebro? yo no me meto de nuevo ahí aunque me maten
-Vamos Liz, serán solo unos días.
-No se qué van a pensar tus amigos.
-Ellos...puedes dormir en el baño.
-Ha-Ha.
-No tenemos cama...
-James, llevo años durmiendo en el suelo, no te preocupes por donde dormir.
-Ah...
-Oye.
-Dime.
-Me voy a cualquier otro agujero.
-No Lisa, escúchame, no te veo hace mucho, te quiero y me importas. Te quedas conmigo.
-James...
-¡Cállate!

Entramos, y todos nos quedaron mirando.

-¡James Allan Hetfield! ¿Dónde mierda estuviste?  -dijo Lars muy enojado.
-Ah, vamos, Lisa y yo nos fuimos de tragos, nada fuerte.
-Podrían haber avisado. -dijo Cliff.
-Lo siento. -dije.

Cliff me sonrió. Algo me sucedía cuando lo miraba y creo que eso me gustaba, pero no mucho al resto.

-Y bueno ¿Qué hace ésta aquí? -
-Termina, Mustaine, Lisa se quedó sin casa y se va a quedar aquí unos días.
-¡¿Qué?! -gritó.
-Eso. ¿Alguien se opone?
-Claro que no  -dijo Lars.
-Por lo que veo tocas el bajo. No hay problema -dijo Cliff. -le sonreí tontamente.
-¡Yo me opongo!- Pataleó Dave
-Cállate Dave. por mayoría te quedas Isa - me dijo James sonriendo.
-Gracias, chicos.

Después de eso tomamos, nos drogamos, peleamos, nos reímos, mil mierdas. Nos reventamos cuanto pudimos y lo pasamos genial. Excepto Dave, que seguía odiandome.

Dos semanas después ya era parte de la casa. Conocí a algunas personas gracias a los chicos y estaba buscando la posibilidad de una banda. Mi deseada banda.

En todo ese tiempo comencé a darme cuenta de que con lo poco que llevaba con ellos, me interesaba demasiado en Cliff...y que me gustaba aunque fuese un poco.

Recuerdo que fue un día de mierda, todos agotados por el calor.
Había desconectado el bajo hace poco, y tenía más o menos cuatro litros de cerveza en el cuerpo que me había metido desde que desperté.

Me acosté en el suelo, tapada con mantas, muerta después de tanta joda y resaca, tenía la luz apagada. Creí que estaba sola, casi siempre los chicos salían y no siempre estaba con ellos.

De pronto sentí que me abrazaban por detrás y comenzaban a darme besos en el cuello. Me voltee y vi que era Cliff.
Sonreí como imbécil y lo besé, se montó sobre mí y bueno...las cosas comenzaron a avanzar.

Él y yo estábamos ebrios y drogados, pero no era como los otros chicos. A pesar de ser un borracho de la puta madre, algo tenía que me encantaba e iba más allá.
Se movía perfecto, pareciese estar sobrio y era, en cierto modo, cariñoso. Lo más probable es que no fuese así, pero lo sentí de esa forma, y preferí quedarme con eso.
Todo iba bien hasta que de pronto se prendió la luz y nos sentamos de golpe.

Dave estaba parado ahí, mirandonos con odio, un odio que pulverizaba con la simple mirada.
Antes de que pudiesemos decir nada, se fue y dio un portazo que casi hizo volar el edificio entero.

Miré el suelo y fijé mi vista ahí, me gustaba Cliff, pero no pude evitar ponerme muy incómoda cuando Dave nos vio. Se supone que nos odiamos, pero él claramente sintió celos y yo ahora no se qué siento. Sólo se que lo que había pasado el otro día quizás para el no fue juego...y ahora estoy pensando que para mí tampoco.

Addicted To Chaos [Re-subiendo]Where stories live. Discover now