PARTE XI: PRIMERA VEZ

7.5K 168 21
                                    

Llegamos a Madrid muy cansados. Me despedí de María y del resto en el mismo aeropuerto. Ella se fue a su casa y yo a la mía para poder dormir y pensar en los próximos proyectos. Después del viaje yo estaba un poco confundida y pensando en replantearme lo que debía hacer de ahora en adelante para continuar con María pero tener tranquilidad al mismo tiempo. Lo único que se me ocurría era seguir ocultándolo para que ella no sienta ningún tipo de presión, pero igual la gente ya empezaba a imaginar cosas entre nosotras. 

Habiendo dormido muy bien, desperté con las ganas a tope de ir al gym, trabajar y verle a ella, por supuesto. Lástima que mi felicidad se vio arruinada cuando vi los vlogs, las fotos y los tuits que ella publicaba: Siempre con la intención de emparejarse con alguno de los tíos que viajaron con nosotras. Yo solo era ''la simple amiga lesbiana'', nada más. Eso me cabreaba de sobremanera, porque estaba harta de la forma en que ''ocultaba'' nuestra relación... cuando en realidad solo empeoraba las cosas. 

- Melo, es lo que le gusta a la gente. - Me respondió cuando le pedí explicaciones. - Ya hemos hablado de esto... yo necesito un poco más de tiempo ¿Acaso crees que de repente voy a decirle a todos lo que está pasando? Pensé que ya lo habíamos discutido...

Claro y el papel de víctima que siempre sabia manejar a su favor. Y yo, la chica loca y desesperada, la histérica y celosa, solo le quedaba apartarse y no responderle nada más, porque ya todo dependía solo de ella. Mis ganas de decirle a todos que estábamos juntas eran incontrolables, yo lo que más quería era gritarlo al mundo entero, pero tampoco podía arriesgarme... no quería perder nada de lo que habíamos conseguido. Así que siempre terminaba cayendo y siguiendo su juego.

- Vale... perdona si soy tan pesada con el tema pero me cuesta mucho.

- Melo, oye, mírame. ¿No confías en mí? - Me preguntó cogiéndome de las manos.

- Sí confío María... sé que esto es de verdad pero no me gusta que vayas por ahí fingiendo que no pasa nada.

Ella me llevó de la mano hasta la cama, estábamos en casa por cierto, me sentó al filo y empezó a besarme. María seguía de pie frente a mí y tomaba mi cara con ambas manos mientras seguían los besos. Creo que a esas alturas ella ya sabía como manejar la situación y como controlarme a mí. Yo solo atinaba a dejarme llevar, le abrazaba fuertemente contra mí y entre susurros me decía que yo era la única. De a pocos y sin planearlo la situación empezó a irse de nuestras manos: Ella se quitó el abrigo y la camiseta. Yo solo la contemplaba y luego seguía con los besos. Mis manos empezaban a jugar con su cuello, luego bajaba hasta su cintura y me detenía ahí un rato. Ella se sentó sobre mí. Yo aproveché en quitarme la camiseta y las gafas. El juego se estaba descontrolando. 

María ya no se notaba insegura, al contrario, estaba dominando la situación. El momento era todo suyo y lo hacía muy bien. Ella detuvo los besos sin alejar su boca de la mía, su respiración estaba muy agitada, se quitó el sujetador y por primera vez pude verla desnuda.... o casi desnuda. Ella siguió besándome. Yo solo seguía sus órdenes sin necesidad de decir alguna palabra. María se inclinó lo suficiente como para poder besar su cuello. De a pocos y entre sus tímidos gemidos, iba bajando mi boca hasta besar uno de sus hombros y sutilmente llegar hasta sus pechos. Ella no dejaba de disfrutar y yo por mi parte hacía lo mismo. 

De nuevo detuvo todo para tomarme de la mano y tumbarse por completo sobre la cama mientras se intentaba quitar los pantalones. Yo seguí besándola, estaba a tope con todo. Llevé una de mis manos sobre su abdomen y terminé metiéndola bajo sus jeans. Ella hizo lo mismo, apretó fuertemente mi mano contra ella mientras la movía de un lado a otro. Su respiración estaba agitándose a tal punto que me asustaba pensar que los vecinos estuvieran oyendo. 

- Te quiero - Me decía mientras besaba su cuello. 

Me alejó un poco para poder quitarse los pantalones y ahora sí, la tenía completamente desnuda para mí. Me sorprendía un poco que ella haya querido llegar tan lejos pero creo que era mi premio a tener que soportar la relación a oscuras de todo. 

- Baja. - Me dijo mirándome a los ojos. 

Yo no lo pensé, solo actué: Iba bajando entre besos... mi lengua jugaba con su piel hasta llegar a su abdomen. Ella abrió sutilmente las piernas sin apartar su mirada de mí. Yo solo hice el resto...

 


Lo que no se puede negar | MELEPE = Yellow Mellow & Cadepe | FANFICWhere stories live. Discover now