10. El camino

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Cap 10- El camino

Él:

Íbamos en el carro, cuando Abi se quitó los zapatos, y me di cuenta que tenerla a mi lado era todo lo que quería en el mundo, su sola presencia me hacía sentir completo. Me gustaba ver que se sintiera cómoda a mi lado, solo que después de aquel beso y las cosas sucias que me dijo, el que estaba extraño era yo.

Se que todo fue solo un juego y aquel beso no significó nada para ella, pero para mí fue un cambio drástico a mi vida.

Es verdad que siempre me ha gustado, incluso creo estar enamorado de ella, pero también es cierto que siempre la he visto como algo imposible, como una niña delicada e inexperta. Ahora sin embargo, después de sentir sus labios en los míos, de esas palabras que me hicieron terminar en mis bóxers sin siquiera tocarla, me han hecho verla diferente.

Debía recordarme una y otra vez que es de mi hermano, pero no puedo, la deseo más que nada en el mundo.

Después de unas horas de camino, llegamos a comer algo. Estaba exhausto.

Fuimos a conocer el área, a comprar un celular nuevo y decidimos buscar un hotel en donde pasar la noche.

Sólo encontramos un cuarto en todo el lugar, uno muy modesto.

- Lamento decirles que solo hay un cuarto disponible, lamentablemente es temporada navideña y mucha gente viene del norte a vacacionar- nos informó la recepcionista.

- Esta bien, lo tomamos- se me adelanto Abi

No preguntó nada sobre el lugar, bien nos podían dar el chiquero, pero ella feliz lo tomó.

- Abi, ni siquiera te has informado sobre...

-No me importa David, estoy cansada y tú no se diga- me revolvió el cabello y guiño el ojo

- Está bien, lo tomamos- ya que más me quedaba por decir, ella lo había decidido. Hasta en cosas tan simples como un cuarto de hotel, ella decide y yo con gusto acepto lo que ella quiera.

Subimos y al entrar nos percatamos que solo había una cama. Nos volteamos a ver y reímos

-¿Creerían que somos pareja?- preguntó inocentemente

-¿No oíste que era el único cuarto disponible?- La abracé por la espalda y besé su cuello. Ella como siempre sonrió - no te preocupes, yo duermo en el sillón

-¡Estás loco! Yo no me quiero morir todavía. No olvides que tu eres el chofer y necesitas descansar- se dió la vuelta y enredo sus manos por mi cuello - dormiremos en la misma cama, ya lo hicimos anoche- se paró de puntillas y besó mi nariz - solo recuerda que soy tu hermanita. Ah solo para tu información, yo duermo en traje de Eva

- Mira lo que son las coincidencias, yo también duermo en traje de Adán, pero por respeto a ti me pondré una camiseta- Soltó una carcajada

- No es necesario, mejor tápate la cara, si tu no ves, yo tampoco- Me soltó y tomó su maleta del suelo - yo me baño primero

!Maldita sea! Cada día me pone más difícil la situación. Nunca había dormido con una mujer sin tener sexo ¡Pero tampoco había terminado en mi ropa interior, sólo por unas palabras!.

Mientras ella se duchaba, yo decidí programar mi número telefónico al de ella, cuando en ese preciso momento sonó. Vi el número en la pantalla y era mi lindo hermanito.

Decidí entrar al baño para dárselo, de seguro querrá hablar con él.

- Abi, te llama Elias ¿Quieres que le diga que te llame después?

Huracan de emocionesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora