Camino a casa. (CAMREN)

Capítulo 12

Capítulo 12

24 de diciembre

Estábamos en casa de un familiar de papá ''festejando'' noche buena. Estábamos todos los Jauregui, al parecer Michael y Christopher habían arreglado las cosas, ya no me importaba la verdad.

-Mira eso, has tenido una pelea callejera. -asombrado, Thomas observaba la cara de Chris-. Quiero ser como tú.

-Debes ser muy fuerte. -complemento Chloe. Thomas y Chloe eran nuestros pequeños primos mellizos. Era normal que idolatraran al primo mayor.

-Soy el mejor jugador de fútbol de Miami, claro que soy el más fuerte.

Mi mirada estaba en MI familia. Todos estaban haciendo un buen trabajo haciendo como si nada hubiera pasado ayer, al parecer la única inconforme era yo.

-¿Qué pasa Lau? -preguntó la pequeña Kaycee. Ella era mi prima favorita, tenía 10 años, era casi tan irrelevante como yo.

-Todo bien, sólo no me ciento con ánimos de una fiesta. -trate de sonreír pero solo logre hacer una mueca.

-Pero... -golpeo su barbilla con su dedo indice-. Hoy es navidad, Papá Noel nos va a visitar y...

-¿Aún crees en Santa Claus? -pregunté riendo.

-No. -suspiro aliviada-. Creí que tu lo hacías. -reí al escuchar eso-. Mamá me ha dicho que debía decir a las demás personas que el existe para estar en ambiente de esperanza y esas cosas.

-Supongo que tendremos que mantener el secreto. -abrace a la niña por la cintura y recosté mi cara en su hombro, Kaycee me abrazo por los hombros.

Ver su entusiasmo me recordaba a mi. Siempre me dio igual la navidad, papá y mamá no supieron conservar el secreto de que Santa Claus no existía por lo que a los 6 años deje de creer en él, arruinaron la magia de la navidad del resto de mis años, sólo esperaba mis regalos y listo. Pero convivir con mi familia era divertido.

-Quiero una hermana como tu Lauren.

-Claro que no. -ambas reímos.

-Este año nos toca a nosotros hacer el discurso de navidad Lauren. -dijo Christopher arreglando su corbata frente al gran espejo de los tíos Anne y Robeto.

-¿Quieres hacerlo tú solo? -bebí de mi zumo de naranja-. Eres mejor en las palabras y... todo.

-¿Llevarme todo el crédito? -asentí-. Claro, por qué no.

-Viva la vanidad. -susurré.

-¡Hola primitos! -entró Kate, hermana mayor de Kaycee y mismísima representación de lo engreído.

-Tenemos la misma edad Kate. -sobre mi cien, tratando de buscar la paciencia para aguantar esta noche.

-Pero si pareces una bebé. -estrujo mi mejilla mientras hacia pucheros y una voz irritante-mente chillona.

-Cuidado Kate eso puede gustarle de más... -susurró Christopher sonriendo malicioso.

-¿Dijiste algo guapetón? -Chris negó sonriendo como todo un ''galán''.

-Ustedes preparen el discurso, yo estaré por ahí. -moví la mano con desdén para después tirarme en el gran sofá rojo.

Me acomode boca arriba, cuidando de cruzar las piernas para que mi falda no enseñara nada. Encendí mi celular y el sonido de los mensajes comenzaron.

Casi todos eran de buenos decesos y cosas de esas, no preste mucha atención pero si me tome el tiempo de responder.

Hey Lauren! :D Recién encuentro tu usuario, deberías aceptarme. -Camila.