Confía en mí » h.s

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Curiosamente por alguna mágica y mística razón Niall y Harry se mantuvieron totalmente alejados durante toda la celebración del cumpleaños de Crystal, logrando así que todo saliera realmente bien. Sinceramente no puedo estar más agradecida con todos aquellos que tomaron un poco de su tiempo para ir a celebrar a mi pequeña aquel día. La felicidad de Crystal es todo para mí y durante toda su fiesta la vi sonreír como nunca antes.

Ahora, dos días después de la celebración volvemos a estar en el tan conocido Bus tour, esta vez con destino a la ciudad de Sidney donde los chicos darán dos conciertos. La verdad es que estoy bastante entusiasmada con llegar, Australia siempre ha sido uno de los países que me gustan, además está el hecho de que podré volver a ver a los chicos de 5 Seconds of Summer después de tanto tiempo lejos.

Sí, aquellos muchachos son realmente un amor y bastante divertidos a decir verdad. La última vez que los vi llevaban la producción de su primer disco. Disco que fue un éxito total y que tengo en casa. Solo espero poder conversar con ellos un rato para felicitarlos por todo lo que han logrado como banda.

Crystal y yo estamos sentadas en el pequeño sofá que está en la parte delantera del bus, antes de las literas. Tenemos un plato con galletas, dos cajas de leche y un libro de cuentos (regalo de Niall) en nuestras manos. Ya es bastante entrada la tarde y no hace tanto calor como uno creería así que estamos cubiertas por una pequeña manta mientras leo las aventuras de los personajes haciendo reír a mi pequeña de vez en cuando.

—¿Qué hacen solas estas dos hermosas mujeres?—Saco mi vista del cuento y veo a Louis acercarse a nosotras con una sonrisa. Le sonrío de vuelta y me muevo un poco para que se siente a nuestro lado.

—Leíamos un cuento ¿verdad mi amor?

—Shi, muy nindo

—¿A sí?—Pregunta interesado Louis viendo a Crystal—¿Y te ha gustado?—Mi pequeña asiente contenta y se separa de mi para ir a sentarse en las piernas de su tío Louis—¿Por qué eres tan adorable?

Me río al ver la sonrisa que se hace espacio en el rostro de mi pequeña. Siempre le ha gustado los halagos, ella sabe perfectamente cuando alguien le ha dicho algo bonito. Estira sus manitos y acaricia el cabello de Louis peinándolo hacia un lado.

—¿Qué hacías tú?—Le pregunto comiendo otra galleta. Estiro el plato hacia él, ofreciéndole.

—Uhm—Mastica la galleta—Había tomado una siesta pero Niall comenzó a tocar la guitarra así que me desperté. Él estaba componiendo así que no me dejó estar en la sala de televisión y las vi aquí, así que me acerqué.

—Oh—Bebo un poco de leche—¿Qué haremos cuando lleguemos a Sidney?

—Tú solo quieres saber cuándo veremos a los chicos—Intenta, de alguna manera poner su rostro molesto sin sonreír—Para cambiarnos.

—¡No es por eso!—Golpeo su hombro con suavidad—Solo estaba preguntando. Pero sí, también quiero verlos. Los extraño.

—Jamás pensé, cuando te los presenté que se llevarían tan bien—Me mira—Bueno, tú le caes bien a todo el mundo así que no me sorprende.

—Eso no es cierto. No le caigo bien a todo el mundo—Por mi cabeza comienza a pasar una lista realmente larga de personas a las que no les agrado y eso me asusta de sobremanera.

—Sé a lo que te refieres y sé lo que piensas. La mayoría de esas personas no te conocen como lo hacemos nosotros. Ni han compartido contigo más allá de minutos, así que no pienses en ello.

—Está bien—Quito la manta de mi cuerpo y me preocupo de doblarla antes de levantarme—Iré a preparar la cena.

—¿Puedo ayudarte? Hace mucho que no cocinamos juntos.