Capitulo 20

7.7K 726 65
                                    

Estuvimos abrazados unos minutos adentro de su auto sin decir nada. Amaba estar así con él, con solo el silencio acompañándonos. Me sentí tan afortunada en ese minuto, quería llorar de felicidad y decirle que lo amaba más que nada en el mundo, que él se había convertido en mi mundo, que no quería nada más que él, para vivir, quería soltar todo lo que me hacía sentir. Pero no dije nada, el silencio estaba perfecto. Habría otro minuto para decir que lo amaba, aunque, tal vez no era necesario decirlo.

-Tengo que ir a casa, Elena llegará en cualquier minuto - Dijo mientras besaba mi frente. Me acurruqué más a él y me quejé, no quería que se fuera y Elena no llegaría.
-Ella salió esta mañana. Fue a visitar a una de sus hermanas y llega mañana. Quédate un poco más. - le dije rogando mientras escondía mi cabeza en su pecho. - Quédate Thomas, quédate, quédate, quédate. - Soltó una pequeña risa y asintió.
-Si me lo pides de esa forma, no puedo negarme- Le sonreí como una niña pequeña y luego salimos del auto hacia la casa.
-¿Quieres algo de beber? - él negó con la cabeza.
-Estoy bien así.
-Pareces muy cansado. - me acerqué a él y desordené su pelo.
-Nada que no pueda soportar. -dijo besando mis labios.
Dejé a Thomas sentado en la mesa mientras preparaba algo de comer.
Ya en la mesa serví las pastas que había que cocinado en unos minutos.
-Delicioso, deberías cocinarme más seguido. ¿Sabes? Serias una estupenda esposa- Solté una risa nerviosa y lo miré por unos segundos. ¿El se casaría conmigo? Sentí como el calor llegó a mi cara y mi pulso se aceleró- No estoy pidiéndote matrimonio ________, quédate tranquila. - le lancé una mirada fulminante y seguimos comiendo.
-Entonces te quedarás sola por la noche - afirmó.
-Así es, nada que no haya hecho anteriormente.
-Es peligroso- Dijo en un tono protector.
-No pasará nada.
-Puede entrar algún ladrón y querer llevarse a mi hermosa novia y yo no quiero eso.
-¿Y qué propones? - lo miré divertida. No sabía a qué quería llegar.
-Bueno... considerando lo peligroso que es aquí y lo hermosa que eres para quedarte sola a merced de un desconocido con malas intenciones, lo mejor sería que me quedara cuidando de ti. Y no acepto un no como respuesta. - Lo miré sorprendida. ¿Él quería dormir aquí? ¿Conmigo?
-No lo sé Thomas... estás cansado y tus padres...
-Ellos no se darán cuenta que no estoy, he llegado a casa cuando ellos ya está durmiendo y _______, dormiré de todas formas aquí con más tranquilidad sabiendo que tu estas bien. Puedo dormir en el sofá-. No sé cómo, pero sentí que con cada palabra que decía lo amaba más. No podía ser mejor. Lo amaba, lo amaba locamente.
-Está bien, pero mi cama es lo bastante grande - mis mejillas lucharon para no tornarse rojas.
-¿Me dejarías dormir contigo? - Yo asentí y él me sonrió. Solo era dormir.
Estuvimos viendo televisión hasta que sentí la cabeza de Thomas sobre mi hombro luchando por no dormirse. Se veía adorable casi dormido.
-Vamos a la cama- le susurré al odio.

Thomas quedó solo en bóxers y sentí mi corazón latiendo descontrolado. Nunca lo había visto tan... casi desnudo.
Nos acostamos yo usando la parte del rincón y Thomas la parte que daba a la puerta.
-Si entra alguien primero se encontrará conmigo - susurró mientras estábamos cara a cara entre la oscuridad.
-Acércate a mí, quiero abrazarte- Sin vacilar me acerqué a sus brazos y a su pecho desnudo. Sentí como aspiró el olor de mi pelo- Quiero dormir abrazándote y sintiéndote a mi lado.
-Yo también. Esto es mejor que solo escuchar canciones por ese aparto que me diste-soltó una risa.
-¿Lo usas entonces?
-Cada noche - sentí su sonrisa sobre mi mejilla y luego estiró sus labios para dejar un beso. De pronto comenzó cantar en mi odio, su voz era lo único que se escuchaba sobre el silencio de la noche, me sentía en el cielo.
Estaba cantando cada vez más despacio hasta que dejó de hacerlo.
-¿Thomas? - No respondió, se había dormido. - Te amo - susurré.
-Te amo también - Mi pechó dejó de subir y bajar. Él había escuchado y no solo eso, él también lo sentía. Quise seguir hablando pero él ya se había dormido.

Nunca había soñado algo así. Estar con alguien que me ame y durmiendo abrazados, la verdad es que nunca. Pero se sentía perfecto, me sentía protegida como nunca antes me había sentido. Por primera vez me sentía afortunada.
Cerré mis ojos para dormir sin antes dejar un beso en el pecho de Thomas. Dormiría mejor que nunca antes.

Aqui esta el ultimo capitulo que me falta subir de los atrasados, lo prometido es deuda. Espero que les haya gustado, denle votar y comenten que tal.

-TheCrank

Beautiful Exception (Thomas Sangster y tu) (Adaptada)Where stories live. Discover now