Capítulo 2. Castigo.

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Se oye un carraspeo.

-No olviden que sigo aquí - interrumpe Werner.

-Claro, no quisiéramos perturbar tus castos oídos- me burlo.

-Después de todos estos siglos de castidad- se me une mi amiga.

- Pero algo han de necesitar... Oh, espera, Felissa, tú me necesitas ahora - sus labios forman una sonrisa malévola- pero como al parecer no me aprecias, me marcho.

Comienza a caminar hacia la salida.

-No esperes que te ruegue- me río - yo sólo quería ser buena, pero sabes que tengo otros métodos para no ser castigada...

Se para de golpe y voltea.

-No lo harías.

-¿Quieres ver que sí? - le reto.

-Está bien, me quedo, pero sólo porque me estás suplicando.

A la hora en punto Werner y yo llegamos a la oficina de la directora, ésta nos recibe y sonríe ampliamente hacia mi acompañante.

-Señor Beaumont, es un placer - extiende su mano, él se la estrecha sonríe - se ve usted demasiado joven, no me creo que sea el padre de la señorita Felissa -Ahora ve en mi dirección de manera acusadora.

-Soy Werner Arber, su tío- sonríe gentilmente - y su tutor legal.

-Claro, ¿Y qué pasó con los padres?

La conversación al parecer se volvió sólo de dos porque la directora me ha excluido.

-Mi tío está aquí para ver lo de mi castigo, no para contar mi historia familiar- digo molesta.

Justo aparece Alex acompañado de sus padres, ambos con cara de pocos amigos, su madre se ve demasiado seria y me pongo nerviosa, es guapa e imponente, Alex heredó sus hermosos ojos, es delgada, ni alta ni bajita, sus cejas perfectamente depiladas y su cabello rubio cenizo liso y largo; su papá es de la misma estatura que Alex, cabellos cobrizo, lentes de aumento y traje, parece que va a una reunión con loa directivos de una empresa y no con la directora Donovan. Dios ¿en qué lío me he metido? Creo que Cloe tenía razón, no saldré viva de esta.

La directora dirige su atención hacia los recién llegados.

-Se supone que debes ser gentil, no estás en condiciones de darte tu paquete - me reprende Wern.

-Sólo quería coquetear contigo, no quiero que sea mi "nueva tía " lo lamento Wern, pero tienes un pésimo tino con las mujeres.

Antes de que tengamos tiempo de saludar a los padres de Alex, la directora Donovan nos hace pasar a su oficina.

-Los he citado el día de hoy porque es importante discutir sobre la conducta inmoral de sus hijos- comienza a hablar la directora- quiero decir que este instituto se basa principalmente en nuestros valores y principios, y estos jovencitos los han violado y han deshonrado a esta institución. El día de ayer los encontré - hace una cosa extraña con sus manos- en una situación muy comprometedora en los baños de chicas, no quiero entrar en detalles, pero ya ustedes imaginarán.- Volteo a ver a Werner quien me mira con una ceja alzada- Este tipo de acciones dañan la impoluta imagen de nuestra escuela, por lo que entenderán no puede quedarse sin castigo. Yo, como representante de este instituto, me siento en la obligación de enderezar a estos jóvenes por el buen camino, para que aprendan a hacerse responsables de sus faltas y cargar con las repercusiones- toma aire, como si se hubiera cansado de decir su gran discurso -¿Hay algo que quieran decir frente a sus padres?- Ninguno de los dos contesta - ¿Alex? ¿Felissa?- silencio - bueno, entonces, Felissa, podrás decirnos qué has pensado de lo que te dije ayer, lo de si quedaras embarazada y las consecuencias.

ReinaWhere stories live. Discover now