Aquí y Ahora (+18)

37 - Hormonas Alborotadas

-Narrador omnisciente

Se removió en la cama por décima vez,
La espalda le estaba dando ligeras molestias y el bebé no había dejado de patear dentro de su panza.

- Bebé ya deja a mami dormir porfavor - le pidió, dando ligeras caricias a su estómago pero eso lo que hizo fue empeorarlo.

Suspiró.

Se giró hacia Bruno quien dormía placidamente desnudo a su lado y recordó que antes de que elloa se fueran a descansar, él le había regalado tres intensos orgasmos.

Se arrimó hacia él y llevó su mano hacia su miembro a la vez que timidamente besaba su cuello, Bruno profirió un silbido desde el fondo de su garganta y se removió en la cama pero no despertó por completo.

Con un poco de dificultad se colocó sobre sus rodillas y se posicionó sobre Bruno sin dejarle caer el peso, a la vez que acariciaba lentamente su pene que poco a poco se iba endureciendo, empezó a besar su torso, dejando lamidas y besos húmedos sobre él.

Bruno abrió lentamente los ojos por el cosquilleo que aquello le producía, haciéndolo encontrarse con una maraña de pelo rubio encima de su pecho.

Un poco aturdido preguntó:

- ¿Muñeca?

Ella alzó la mirada y le sonrió traviesa desde atrás de su pene, sacó la lengua y lamió desde arriba a abajo, empezó a bombear sobre él con ambas manos haciendo a Bruno gruñir.

- Dios...eres insaciable - él jadeó, llevó sus manos a su cabellera y la volvió coleta para controlar los movimientos de la rubia sobre él.

- Culpa a las hormonas.

Mientras bombeaba su pene descendió hacia sus testículos a sobre los que empezó a trazar círculos con la lengua, eso pareció volver aún mas loco a Bruno.

- Quiero que me recuerdes que aún te gusto - murmuró, dejando besos húmedos sobre él - Te necesito Bruno.

Él se sentó en la cama, apoyando su espalda al espaldar.

- Vas a ver que me gustas como sea - la atrajo hacia él, sentándola en su regazo - Y que así embarazada estás mas jodidamenrte caliente que cualquier mujer.

Se acomodó sobre él de manera que su panza no chocaba con la de él, intentó moverse pero le era imposible, el bebé dentro de ella pesaba mucho.

Bufó - Peso dos toneladas y no puedo moverme, tendrás que demostrármelo en otra posición.

Él rió y le palmeó el trasero para que bajara de él, se colocó detrás de ella y colocó una almohada en la cama.

- Levanta el culo y apoya el torso de forma en que no lastimes al bebé, busca comodidad en la almohada.

Ella asintió, colocándose como pudo sobre ella hasta quedar más o menos cómoda y removió su trasero delante de Bruno.

En esa posición él se puso de rodillas y se agachó justo delante de su sexo que ahora lo tenía en frente mientras ella se encontraba en "pose de perrito".

Agarró las cachas de sus nalgas y las apretó, abriéndose paso con la lengua por su sexo ya empapado y anhelante de más de él. Extendió la mano hacia la cómoda de al lado de la cama, extrayendo el juguete sexual que Novalee usaba cuando él no estaba.

Ella sonrió para sus adentros cuando escuchó el aparato encenderse con un pequeño rugido y empezó a vibrar.

Bruno lo colocó en su entrada y lo introdujo a la mitad encendido en el primer nivel, tan solo aquello la había hecho gritar de placer y a eso le sumó, la tortura que empezó a darle con la lengua sobre su clítoris.

Novalee se aferró a las sabanas, tomó la almohada y la mordió con fuerza tratando de distorsionar sus gemidos, él no se detenía, ella no quería que él lo hiciera.

- Más Bruno... Por favor...

Él puso eo nivel 2 al juguete y lo introdujo un poco más, moviéndolo en círculos para tocar sus paredes vaginales, cuando empezó a moverlo dentro y fuera, sus fluidos le salpicaron la cara.

- Joder muñeca... Estás tan empapada - él jadeó, ella mordió aún más la almohada.

- Vamos Bruno... Se siente muy rico pero quiero el tuyo dentro, ya por favor...

Él se colocó detrás de ella ya sobre sus rodilla, flexionando sólo una de ellas para empezar a frotarse sobre su humedad.

Se introdujo en ella sin lentitud ni rapidez, colocó sus manos en sus hombros, haciéndola llegar hacia atrás justo cuando él iba hacia adelante.

- Más muñeco, más...

Embistió con mas fuerza como ella le pedía, echando su cabeza hacia atrás para gruñir con libertad.

- Voy a correrme Bruno, voy a hacerlo para tí.

Él echó su cabello hacia atrás violentamente, besó sus labios, absorbiendo todos sus gemidos mientras ella se corría,besó su frente antes de retirarse y morder el hombro de ella mientras se corría también.

Ella cayó en la cama exhausta y él la siguió.

- Tengo que limpiarme, muero de sueño - ella murmuró luego de que se estabilizara, él se puso de pié.

- No tienes que ponerte de pié, yo buscaré paños húmedos para limpiarte.

Ella arqueó una ceja - ¿Crees que no soy capaz de pararme y limpiarme yo misma?

Él rodó los ojos - Oh Vamos muñeca, sólo quiero hacer las cosas mas fáciles para tí.

Ella se sentó en la cama - ¿Acabas de rodarme los ojos?

Él dio dos pasos hacia ella - ¿No puedo rodar los ojos ahora?

- Eso significa que te fastidio y ¿Sabes? - su voz empezó a fallar - Yo no quiero eso Bruno.

Sus palabras se convirtieron en sollozos y las lágrimas empezaron a caer.

Las hormonas la hacían llorar y enojarse a la vez para luego reírse, eso a él le pasaba algunas cuatro veces al día y ya estaba acostumbrado.

La atrajo hacia él y la abrazó para luego besar su frente.

- No me fastidias mi amor, eres mi vida y... Yo..te adoro.