¿Una vida sin ti? Imposible. [Terminada]

17.- Guerra declarada

~Capítulo 17.: "Guerra declarada."~

*Narra Mark*

Luego de ver salir a TN de esa manera de la oficina y luego con esa furia del lugar no pude evitar no preocuparme. Tras pensarlo un poco y recibir unas señas por parte de JinYoung salí corriendo tras ella sin importar mi horario de trabajo, supuse que lo más obvio era que iría a su casa por lo que tomé el camino hacia ese lugar y unas cuadras más allá se encontraba ella, parada con la vista en lo bajo. Su brillante cabello cubriendo su espalda, la delicada figura de su cuerpo y lo ocurrido, simplemente hacían que mi corazón dejase de latir. Me detuve en seco y segundos después mis pulsaciones aceleraron con notoriedad. Grité su nombre para llamar su atención y esperar que volviera la vista pero no fue así. Arrojó algo al suelo y continuó corriendo. Debía ir tras ella, era una necesidad. Sin saber que le ocurría y verla así no podía estar tranquilo, ni en lo más mínimo. Volví a correr para no dejarla ir, pero frené al ver el collar que había comprado para ella en el suelo. Me agaché y lo tomé en mis manos mirándolo con tristeza y confusión.

— No...

Fue lo único que pude murmurar antes de correr una vez más hasta su casa. Era prisionero del miedo con sólo pensar que podría estar enfada conmigo por quien sabe. Utilicé todas las fuerzas que mis piernas tenían para llegar cuanto antes y en menos de lo que esperaba di con ella pero ya era demasiado tarde. Ya se había encerrado en su casa y ni pensar en lograr que abriera. Con el impulso que llevaba al llegar a su puerta choqué suavemente con ella y me apresuré en golpearla llamando a esa hermosa chica que se había encerrado, sin poder darme a conocer sus motivos.

— TN abre la puerta por favor.— permanecí pegado a la puerta para intentar oír algo.— Se que estas ahí, vamos. No sales de ese modo por que si... Conf... Confía en mi, por favor....— esperé el tiempo suficiente como para aburrirme de su silencio y golpeé con enojo el único objeto que nos separaba.— ¡Kim por favor ya basta! ¡Si no darás explicaciones al menos da señales de vida! ¡Se que estas ahí, te conozco y no soy tonto! También puedo oír tus sollozos... Por favor ya detente...

Inútilmente permanecí ahí por una respuesta que no obtuve. Lo único que conseguí escuchar fueron gritos descontrolados de JaeBum quien venía llegando y me confrontó con enojo. Jaló de mi brazo alejándome de la puerta y seguido me empujó hasta la acera. "¿Que estas haciendo aquí? ¿No tuviste suficiente ayer?" decía con notorio desprecio en cada una de las palabras y su mirada. Sin responder a sus preguntas giré hacia la puerta para volver a insistir pero con brusquedad tiró de mi entorpeciendo mi cometido.

— No te acercarás a ella.— dijo sujetando mi brazo con fuerza.— Por si no recuerdas, ayer te dio a entender que no quiere estar contigo, ¿Por qué querría estar con un recién conocido?.— rió con sarcasmo.— Y ahora quizás que le habras hecho para tener que rogar de ese modo. Pero sólo te advertiré una vez Tuan, si te acercas a ella te las verás conmigo, y si le haces daño no te imaginas lo que te espera. No la toques.— dijo luego de una pausa.— Ella no es para ti, no eres merecedor de algo tan valioso. TN es asom.— interrumpí.—

— Se perfectamente lo que es y cuanto vale, no tienes por qué venir a decirme esto. Y mira Im, yo estoy enamorado de aquella chica y haré hasta lo imposible por estar con ella, tus celos y amenazas no serán un impedimento para luchar por su amor y si debo luchar contra ti o cualquier otro, pues que así sea. ¿Sabes? Esto será lo último que te diré y por favor dale vueltas en tu cabeza ¿Sí?.— Su mirada de odio y temor me impulsaron a continuar.— Tardaste 10 años Im, 10 años.— recalque.— en darte cuenta de lo que TN era. De la valiosa y preciosa joya que es y recién ahora vienes a tratar de conseguir su amor. En cambio este "recién conocido" tardó absolutamente nada en valorarla. ¿Quien fue más astuto? Que se te quede y piénsalo.— indiqué la cabeza.— No vengas a hablar tonteras, no tienes derecho.— dije disminuyendo el tono de voz.— Y lo repito por última vez, haré todo por estar junto a ella, que no se te olvide.