Capitulo 35

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Lena

Mi vida escolar nunca fue como una novela.
Nunca quedaba con alguien antes de ir a clases, ni me pasaban a buscar.
Mi vida era simple; levantarme veinte minutos antes de clases, cambiarme, ir al baño e irme a la escuela. Siempre llegaba tarde, pero nunca me llamaban la atención.
En la escuela me sentaba al frente, lado de la ventana. No hablaba con nadie a menos que sea necesario.
En los recreos leia, no salia del aula.

No me considero una nerd. No me pasaba tardes estudiando, ni me gustaba hacerlo.
Solo soy curiosa, y me gusta poder debatir.

No tenia amigos, por lo que, cuando faltaba, no pedía los deberes porque no tenia a quien. Y eso siempre me traía problemas. Pero yo me mantenía en el papel de despreocupada con buenas notas.

Pero aquí estoy. Llendo a la escuela después de desayunar en una cafetería con, mis ahora, amigos.

Quedamos para que aclarara el malentendido que creó la puta de Emma.

Les conté la verdad. No tenia porque mentir.
Les dije que no era violenta, que nunca me metí en una pelea, y que lo que había pasado con la zorra fue un impulso de frustración.
Ahí mentí un poco.

Durante el corto trayecto desde Lapana hasta la escuela, me he dado cuenta de que tanto Alex como yo no participamos mucho en las conversaciones.
Yo, porque no se me da muy bien conversar; y Alex, porque, bueno… no se bien, supongo que es así.

Cruzamos el umbral y nos dirijimos hacia los casilleros.

Los de Andrea, Támara y Nicolas estan un poco más lejos que los nuestros, así que Alex y yo nos debemos detener y ellos seguir.

Nos detenemos en nuestros casilleros, frente a la direccion.

Pero los demás no siguen. Están detenidos mirando a la dirección.

Mi mentón llega al piso, estoy segura.

No me lo puedo creer.

-Ahi esta ella -Dice la zorra señalándome. Su voz es de fingida inocencia.
-Magdalena Torres, acompañeme.
-Esto debe ser una puta broma -Mascullo.
-Nos djiste que no le habías hecho nada -Dice Andrea con, ¿Decepcion? en su voz.
-Yo no le hice una mierda -Maldigo por haber hablado tan alto.
-Señorita, acompañeme. Ahora -El tono del director debe asustar a todos; menos a mi- Chicos, a sus cursos.

Me abro paso entre los chicos, ignorandolos y estos se van a el curso.
El director se da la vuelta, dirigiéndose a su despacho. En cuanto nos da la espalda, la puta me dedica una sonrisa asquerosa con sus labios partidos.

Meda asco verla. Yo no la he dejado así.
Tiene los labios partidos, marcas rojas en el cuello y la mejilla un poco morada.
Justo hoy decide no maquillarse. Debe encantarle sentir la atención de las personas. Aunque solo la miren por pena.

Cierro la puerta detras de mi y miro al director sin una pizca de miedo.

-Sintese -Me ordena. No obedezco, no voy a dejar que me haga sentir inferior.
-Estoy bien así -Espeto, sin molestarme en dar el el finjido gracias.
-Con esa actitud no llegara lejos -Ya lo hice enojar.
-Pues mireme usted donde estoy y lo que he logrado -Vivo con mi hermana, lejos de mis padres, y asisto a una de las mejores escuelas del país.
-Deberia expulsarla por irrespetuosa, además de agresora -Esta es la peor broma del maldito universo.
-Primero, no le he faltado el momento en ningún momento, solo me dije la verdad. Y segundo, a esa chica, yo no la deje así -¿Como se habrá hecho tanta mierda?
-Eso no es lo que ella dice -Al parecer no esta disfrutando de esta partida. Debe verlo como un juego, intimidar a los alumnos y hacerlos sentir incómodos e inferiores.
-Ella esta mintiendo. Ni siquiera sabe mi versión, la verdadera, de la historia -Ni siquiera me ha preguntado que ha pasado o porque los he hecho.
-Adelante, cuenteme su versión. No mienta, porque si lo hace estará expulsada -Me amenaza y Contengo las ganas de soltar una carcajada.
-No puede expulsarme por algo que sucedió en la calle, fuera del horario escolar. -No puede, ¿Cierto?- Respecto a lo de Emma, yo no la deje así. Apenas la toque -No se que mierdas le habrá soltado al director- Digame que le dijo esa chica.
-Me contó que la atacaste el la vereda del shopping que hay a menos de una cuadra -Al menos no mintió sobre el lugar.
-Atacar es mucho decir -Empotrarla contra la pared no es atacar, ¿Verdad?
-Cuenteme todo -Se cruza de brazos y se recuesta en la silla.

Como lo SoñeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora