Una pequeña mano toca la pelota antes que yo y me pega un codazo. Nada grave.

Lena pasa la pelota y se da vuelta para mirarme. Su cara esta mas pálida y rosada que de costumbre, y el sudor hace que sus cabellos se le peguen al rostro.
-Perdon -Dice jadeando, pero fría.
No me da tiempo a contestar, porque sale corriendo demasiado rapido.
Sigo jugando.

El partido es dinámico. Con Lena en el equipo de las chicas el juego es mas divertido.

No respeta su posición, pero se mantiene.
Sabe saltar y bloquea si miedo.
Es muy competitiva.

¿Como lo se? Pues lo acabo de descubrir.
Grita mucho cuando el resto de las chicas se equivocan y las insulta. Además de que cuando el profesor le pregunto si quería cambiar, dijo que no, aunque todos la notabamos cansada.

Me da gracia, pues no sabia que era así de apasionada. En las clases anteriores, demostraba odio a los deportes, y sobre todo a las pelotas. Pero hoy, es magnifico.

Hoy ha roto toda la idea que cree de ella. La imagine seria y profesional en todo momento. Muy racional, pero esto, es todo lo contrario.

Putea mucho, y el profesor se ríe. Al parecer el también creyó en na fachada de nerd.

Estoy desconcentrado.
Faltan minutos para que termine la hora y las chicas van ganando tres a dos.

La culpable de eso es Lena. Sabe jugar y juega sin miedo ni delicadeza. Como un chico.

Me gusta mas todavía. Me gusta esta pasión que transmite y lo competitiva que es.
Es una nueva faceta.

¿Algun día lograre conocerla por completo?

El silbato suena y el partido termina. Hemos perdido.

Eso duele.

-Buen partido. Estiren -Dice el profesor y todos buscan un lugar en donde estirar- Torres, ven -Lena se vuelve a hacer la cola y se acerca al profesor.

Me ubico al lado del profesor. Quiero escuchar.

-Juegas bien -Le alaga el profesor- ¿Has ido a los Evita
-Si, en primero -La voz cansada de Lena es totalmente diferente a la de hace unos minutos.
-¿En handball?
-No, atletismo. Velocidad y vallas -¿Que?
-¿No entraste al equipo de handball? Se que tu escuela gano varias veces estos últimos años en Mar del Plata -¿Que?
-Si, podía haber ido a entrenar para ver si entraba, pero tenía que ir a clases aparte y el deporte no me gusta -No lo parecía.
-Mostraste otra cosa recién en la cancha -El profesor rie- Debes cuidar tu boca. Yo no tengo problema, pero otros profesores y el director si.
-Me gusta ganar, y perdón, soy muy mal hablada. Más aún cuando juego.
-¿Y que tal te fue con atletismo? El primer día hiciste buenas marcas, pero con la pelota no te llevabas.
-No me gustan las pelotas. Handball es el único deporte en el que juego si miedo. Y en atletismo, gane en nivel local en salto de vallas y pase a Catamarca, pero renuncie y no volví -Si paso, ¿Porque renuncio?
-¿Por que? -Nuestro equipo nunca fue muy bueno.
-Porque en primero es obligación entrar en alguno, pero a mi no me gusta viajar para competir en algo que no me gusta.
-Eras buena, pero no te gustaba así que ¿Dejaste la posibilidad de llegar a competir a nivel nacional solo porque no te gustaba?
-Exacto -Dice orgullosa.
El profesor se ríe y le coloca una mano en el hombro. Lena se hace para atrás y el profesor retira la mano.
-Disculpa. Me hubiese gustado tenerte hace un par de años, ya no puedes competir.
-No me gusta que me toquen. Mi hermana lo pensó, pero aun era inmadura y pequeña para mudarme -Fue hace solo tres años ¿Que paso?
-Esta bien. Ve, estira y luego ve a las duchas.

Lena pasa por mi lado y me mira de reojo.
No me di cuenta de que la mayoría ya se fue a ducharse.

***

Como lo SoñeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora