-Lo tengo.- Gritó Nicholas parándose, todos se giraron a él y lo miraron esperando a que siguiera.- Tengo el pergamino contra hechizos que Rei le da a las chicas que vienen pidiendo ayuda.- Prosiguió.

-¿Pero no es contra maleficios?-Cuestionó Andrew confundido.

-Si, pero creo que servirá contra este hechizo, no perdemos nada con intentarlo.-Respondió acercándose a la puerta de entrada con el pergamino en mano, seguido de los demás, esperanzados de que eso funcione.- Por favor, ayúdanos a salir de aquí.-Murmuró al pergamino pegándolo a la puerta. Una luz salió de él y Nicholas, entusiasmado, abrió la puerta, haciendo que Ikuko gritara de la alegría.

-¡Vamos! Debemos ir con mi hija.-Gritó corriendo hacia la salida, seguida por su marido. Andrew, Sammy y Nicholas se miraron, se sonrieron y corrieron sacando sus celulares de sus bolsillos, necesitaban una pequeña ayuda de sus amigos.

-Bueno, tal vez la Pequeña Dama no les preocupe tanto como creía, pero seguramente ella sí.- Tomoyo comenzó a gritar mientras las sombras la estiraban a ella también.

-Tomoyo.- Eriol intentó usar sus poderes de Luz para acabar con la barrera, pero ésta titilaba y no alumbraba lo suficiente.

-Tu preocupación no deja a tu Magia trabajar bien.- Rió Ruy.

-Déjalas en paz.- Sollozó Sailor Moon viendo cómo su hija dejaba caer unas lágrimas por el dolor.

-Si tú te entregas, las dejaré ir.-

-No lo hagas Serena, encontraremos la forma de liberarnos.-Gritó Fireball y las sombras comenzaron a lastimarla a ellas también.

-Princesa.-Exclamaron los Three Lights apretando los puños.

-Debemos hacer algo.- Sailor Moon miraba a Sakura que temblaba por la impotencia, sin saber qué hacer. –Seiya piensa en algo, por favor.- Le pidió la rubia mirándolo, pero él no podía concentrarse.

-Creo que necesitan un incentivo.- La sonrisa de Ruy era cada vez más grande y Mei-Ling comenzó a gritar.

-¡Ey tú déjala tranquila!-Todos se giraron a la entrada del parque, donde estaba Sammy con una linterna rodeado de personas también armados con objetos luminicentes.

-Sammy vete, te lastimarán.- Gritó Mei-Ling preocupada y las sombras la apretaron más.

-Te dijo que la soltaras.- En la otra punta del parque estaba Andrew, también rodeado por personas con linternas.

-Drew.-Murmuró Jupiter queriendo correr hacia él.

-¿Ustedes creen que unas simples personas me van a poder detener?-Rió el Rey de las Sombras y con un movimiento de sus manos un grupo de sombras corrieron a atacarlos.

-Chicos.-Gritaron todos pero las sombras nunca llegaron hasta ellos, porque otro grupo de personas encendió sus linternas extinguiéndolas.

-Nicholas.-Exclamó Mars sorprendida. Ruy, ahora enojado, envió a otros grupos pero nuevamente apareció otro grupo que las extinguió.

-¿Mamá?-Preguntó Tomoyo sorprendida entre lágrimas por el dolor.- ¿Cómo llegaste a aquí?- Sonomi lideraba al cuarto grupo de personas, entre las que se encontraban los amigos de los Magos, que miraban todo sorprendidos.

-Me sacarán de quicio.-Gruñó Ruy lanzando otro grupo hacia ellos, y otro grupo de personas apareció.- ¿Más?-

-Mamá, Papá.-Los ojos de Sailor Moon se abrieron de par en par al ver a sus padres allí.

-Lo mejor será que sueltes a mi nieta, rata asquerosa.-Gritó Ikuko sorprendido aún más a su hija. Ruy la miró con fuego en los ojos y mandó a sus últimas sombras al ataque, sin embargo, nunca llegaron a su objetivo, porque los cinco grupos prendieron sus luces al mismo tiempo, iluminando el parque entero, haciendo que la barrera que encerraba a los Guardianes desapareciera, al igual que las sombras que sostenían a las prisioneras, Kero y Spinel fueron rápidos y volaron a detener su caída, llevando a las cuatro a un lugar seguro.

Sailor Moon Card Captor.Where stories live. Discover now