Is It Wrong to Try to Be a Hero in a Dungeon?

Capítulo 12: Juego de Guerra

Lejos de Orario, estaba el castillo donde se había establecido la Familia Apollo. El antiguo baluarte de una época anterior a Orario se había reforzado para adaptarse a las necesidades del Juego de Guerra y, toda la Familia Apollo ahora mismo estaba distribuida por todo el castillo y sus terrenos interiores. Todos y cada uno de ellos estaba tenía la absoluta seguridad de que nada ocurriera. Estaban muy confiados creyendo que el otro bando no podría siquiera atravesar la muralla principal del baluarte.

Los arqueros que estaban apostados a lo largo de toda la estructura defensiva también opinaban lo mismo. Estaban tan tranquilos y confiados que, no fue hasta que el desconocido encapuchado estuvo corriendo hacia ellos por el lado oeste del castillo que no fueron capaces de detectarlo.

— ¡Se acerca un intruso! — gritó uno de los arqueros mientras se preparaba para disparar. Todos, a pesar de la sorpresa, reaccionaron con velocidad y una gran ola de flechas fue lanzada en dirección de la única persona que avanzaba a gran velocidad en dirección del muro de la zona este. De debajo de la capa que escondía su identidad, una larga espada de color rojo carmesí brillo y, cuando fue blandida hacia delante, una gran llamarada ardiente salió de ella, consumiendo todas las flechas que encontró a su paso. Pero, las llamas continuaron avanzando y golpearon con fuerza la piedra y a varios de los aventureros que estaban en lo alto del muro.

— ¡Están usando espadas mágicas! – gritó un pequeño pallum al llegar al frente de la fuerza principal de defensa de la Familia Apollo. Lisos, un elfo que ejercía de comandante, se giró hacia el mensajero. — ¡Hyakinthos ha ordenado que 50 personas salgan a enfrentar al desconocido!

— ¡50! ¡Esos son demasiados! — argumentó el elfo con los ojos abiertos.

— ¡Si son menos, las espadas mágicas acabaran con todos! — al acabar la frase, otro gran temblor sacudió el lugar, todo provocado por otra oleada de llamas que había golpeado la muralla.

— ¡Acompañadme! — gritó Lisos mientras desenfundaba su propia espada.

A fuera, la situación seguía igual. Los arqueros, cada vez que intentaban atacar al encapuchado, eran bombardeados por una gran llamarada o una tormenta de rayos. El poder de las espadas era tal que ya había abierto una gran brecha dentro del muro principal de la muralla. Cuando los primeros aventureros de la Familia Apollo salieron a enfrentarse al desconocido, también fueron arrollados por la poderosa magia contenida en las espadas.

Pero, todo ese poder tenía un gran precio y, tras tantos usos, ambas espadas mágicas acabaron por descomponerse en cenizas; dejando a la aventurera encapuchada sola frente a un gran número de enemigos.

— ¡Está desarmada! ¡Avancemos! — Pero, cuando todos los aventureros se agruparon y rodearon a la desconocida, sintieron una gran presión que los empujaba al suelo. La gran mayoría cayó cuerpo a tierra ante la acción de una magia desconocida. Solo aquellos que tenían el nivel 2 fueron capaces de mantenerse de pie, aunque aún así, seguían sin poder moverse de sus sitios.

Cerca de ahí, estaba una de las nuevas incorporaciones a la Familia Hestia, Yamato Mikoto, alias, Zetsu Ei. La aventurera, con gran esfuerzo, estaba usando su magia gravitacional Futsunomitama para retener a los 40 aventureros que seguían conscientes y fuera de las murallas. La aventurera encapuchada, incluso a pesar de que estaba bajo la influencia gravitatoria de la magia de Mikoto, fue capaz de caminar y salir del círculo mágico.

— Bien hecho, Zetsu Ei. — le dijo la aventurera encapuchada a su compañera.

— Gracias. — dijo sin dejar de concentrarse en su magia.

— Ahora, es el momento de los hijos de Loki. — susurró la aventurera sin dejar de mirar a los aventureros rendidos por el suelo.

En el otro extremo del castillo, dos sombras encapuchadas aparecieron. Tras el gran ataque anterior, las murallas habían quedado prácticamente desiertas, por lo que les daba la oportunidad perfecta para atacar.