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Skye
Edmonton, 14 de julio de 1993
05:00 P.M.

Me detuve con una sonrisa frente a las veinticuatro velas de la tarta de chocolate que Emilia había amasado con sus propias manos. Pensé durante un rato qué deseo pedir. Cuando el rostro de mi hermano tomó forma en mi mente, un pinchazo me sacudió el pecho. Me esforcé por no fruncir las cejas, mantuve una expresión alegre y soplé las velas sin pedir ningún deseo.

Emilia y Chris aplaudieron con ganas.

Querida hermanaWhere stories live. Discover now