[ XXl ]

211 21 2
                                    

Ya era de mañana y la princesa de Asturias aún continuaba acostada en su cama, como si todavía no quisiera levantarse, pero tenía que, ya que estaban por tomar su vuelo de regreso a España para que ella se preparara para volver al internado, al igual que los demás. Justo cuando se volteó hacia atrás pudo ver qué Christian estaba junto con ella, pero este olor la miraba con una sonrisa en su rostro.

— ¿Qué haces aquí? — cuestionaba en tono bajo ya que no quería que la escucharán sus padres, mucho menos su hermana.

— Vine a admirar tu belleza — respondía. — y a recordarte que lo de anoche fue muy cierto, y está vez no había bebido nada.

Leonor frunció el ceño — ¿me estás diciendo que también lo de esa noche lo recordabas?

El principe se encogió de hombros para después sonreírle.
Esto provocó que la rubia-castaña le lanzó una almohada en la cara.

— Creo que deberías irte, no será correcto que mis padres nos encuentren juntos en mi habitación.

Christian volteo a mirar hacía la puerta y después regreso su mirada con Leonor.

— Que nos encuentren ¿cómo?¿Así? — se lanzó sobre Leonor, quedando así arriba de ella, rozando solo sus narices.

Este gesto hizo que la princesa se sonrojara.
— Así sería peor, creeme. — reía nerviosa

Christian se quedaba mirando el rostro tan bello de Leonor, la cual hacía lo mismo que el, ambos estaban demasiado cerca que podían hasta sentir sus respiraciones.

— Princesita...¿me preguntaba si tú y yo podríamos intentar algo? — cuestionaba mientras que acariciaba su cara de la española.

La rubia-castaña fruncía el ceño — ¿Como qué?

— ¿Podría tener una relación contigo? — hizo está pregunta lentamente, ya que acariciaba el pelo de la princesa de Asturias.

La ojiazul no pudo evitar sonreír de escucharlo.
— Si, Principito. — asintió con su cabeza.

En cuanto le contesto, el castaño de inmediato se acercó a los labios de ella para plantarle un beso en ellos. Justo en ese momento entraba Sofia llamando a su hermana, provocando así que el castaño se levantará de inmediato e hiciera como si estuviera buscando algo.

— Ay por Dios... — Sofia se tapaba sus ojos con su mano

— No es lo que tú crees — respondía nerviosa Leonor.

— De hecho no, yo estaba buscando algo. — añadía el principe.

— ¿Enserio? — se cruzo de brazos la española menor — dudo que lo que buscarás estuviera en la boca de mi hermana. Rayos, chicos, ¿si saben que para dar ese paso deben casarse?

— No estábamos...no íbamos a hacer nada de eso, te lo juro — respondía Christian.

— Saben que...Leonor te esperamos abajo, y ya dejen de hacer cosas que no deben...sobre todo si están mis papás — comento con desagrado para después darse la vuelta e irse.

Después de que Sofía saliera, Leonor comenzó a lanzarle almohadas al británico, ya que gracias a lo que había pasado hace un momento, ahora su hermana la molestaría con eso.

— ¡Ya fue mucho!

— Te lo había dicho, Christian, y aún así no te...— no pudo seguir hablando ya que se quedó mirando la muñeca del castaño.

Lo que traía en ella se le hacía familiar, solo que no lograba ver bien que podía ser, hasta que tomo la mano de el para mirar mejor. Se dió cuenta que el traía el reloj que ella le había dado cuando eran pequeños, así que solo sonrió en cuanto lo vió.

Fall In Love With YouWhere stories live. Discover now