47 // a birthday lunch

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▶『 Haarlem, Países Bajos 』

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▶『 Haarlem, Países Bajos

Agosto, 2023   


―Lo odias ¿Verdad?―pregunto divertido mientras nos encontrábamos en el baño cepillándonos los dientes frente al lavabo.

―No lo odio-odio―conteste intentando explicar lo que sentía. ―Odiar es una palabra muy grande y requiere de mucho esfuerzo. Yo simplemente...―lo pensé. ―No coincido con la gran mayoría de cosas que dice, hace o piensa―me encogí de hombros como si fuera simple y Max sonrió divertido ante mi reacción. ―Miralo de esta forma―corrí hacia la habitación y tomé una de las almohadas de la cama para traerla conmigo hasta el umbral entre el baño y la habitación. ―Max, él es mi padre. Papá, él es Max... ¿Tu que harias?―pregunté con la almohada sosteniéndola a mi lado. 

―¿No lo habías matado?

―No viene al caso, Emilian. Volvió porque quiere arreglar las cosas, lo que sea―respondí poniendo los ojos en blanco porque ese no era el punto.

Max observó la almohada junto a mi aun con su cepillo en su boca llena de pasta dental y sin pensarlo dos veces le lanzó el puño a la almohada pegándole con fuerza haciendo un gesto que me pareció muy divertido con el rostro.

―¿Lo ves? Es igual―me encogí de hombros lanzando la almohada devuelta a la cama y continué cepillandome los dientes.

―Pero tu padre es un idiota que se fue―aclaro mirándome por el espejo.

―Max, el tuyo te dejaba entrenando en medio de la nieve.

―Eso me sirvió para aprender...

―¿Dejarte en una gasolinera te sirvió para aprender tambien?―pregunte mirándolo sabiendo exactamente la respuesta. ―Seamos sinceros, Max. Nuestros padres son una mierda se hayan ido o se hayan quedado. No se cual fue peor―suspire escupiendo en el lavabo pero él se quedó pensativo frente al espejo mientras me limpiaba la boca.

―Temo algún día ser como él―admitió y me estremecí de tan solo pensarlo. ―Intento trabajar en manejar la ira y los impulsos, pero al final del día lo llevo en la sangre. Lo llevo por él―confesó. Lo entendía. Mejor que nadie lo entendía.

―Nunca serás tu padre, Max. Para bien o para mal. Nunca seremos ellos―me sostuve del borde del lavabo blanco mirándolo a través del espejo. ―No eres así con P.

―Pero ella no es mi hija.

―Y aunque lo fuera tampoco lo serías porque no eres tu padre. Eres Max, eres amable, eres comprensivo, eres atento, eres afectuoso, eres sensible―enumere afirmaciones. ―Repite conmigo: no soy mi padre, soy Max.

Capri Persson ⸻ F1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora