35) Fin de las vacaciones

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Girando sobre su propio eje, las llamas azuladas se alzaron a su alrededor con fuerza, con un movimiento ascendente de su varita se comenzaron a arremolinar con poder, comenzando a tomar la forma de un demonio alado.
—Mantenlo...
Murmuró Vinda en su corazón, viendo con un orgullo casi palpable a su nieto moldeando las mismas llamas que una vez había visto a su amo hacer.
El demonio alado, con una cabeza de dragón y unos cuernos extremadamente largos, se expandió de un tamaño descomunal, siendo dirigido hacia el cielo por Izar, donde explotó en un gran espectáculo de llamaradas azules y un calor abrazador que rodeo toda la finca.
Atrás de el, la varita de Vinda se levantó al instante y sin pronunciar ni una palabra, una barrera transparente se ergio con toda su fuerza sobre todo el terreno, protegiéndolos de las llamas que los hubieran impactado de frente.
—¡Maravilloso!, tienes un talento simplemente aterrador, me tomo más de un mes conseguirlo por primera vez y lo lograste a apenas dos semanas de tu llegada. Tu madre ciertamente estaría orgullosa del mago tan bueno en el que te convertiste.
Sonrió la mujer, quién juraría soltaría unas cuantas lágrimas en cualquier momento.
—Pero tienes que aprender hacia donde diriges tus hechizos, si no hubiera alzado las barreras, todos seríamos carne asada.
Reprendió, provocando en Izar una sonrisa divertida por sus rápidos cambios de humor, su mirada acuosa siendo borrada por una de irritación.
—Ven, estoy segura que necesitas un buen descanso, llevas entrenando como loco estás últimas semanas.
Asintiendo, comenzó a avanzar tras la mujer, una sonrisa complacida lentamente asentuandose en su rostro. Había obtenido un hechizo tan peligroso y tan bueno, no era magia oscura, así que no lo afectaría en ningún sentido, después de su pequeño problema que lentamente se extendía, estaba un poco reacio a probar magia oscura, con la que podría empeorar su condición, para el era mejor aprender hechizos simples lo más pronto posible, era un Black y tenían enemigos hasta por debajo del suelo, nadie sabía cuándo lo requeriría.
—Lograste aprender el hechizo, dominarlo dependerá de tu disposición, puedes mantenerlo como lo hiciste o puedes mejorar a tal punto de volverlo un susurró silencioso y sin embargo, más peligroso. Si logras entenderme.
Asintiendo con la cabeza, estuvo de acuerdo, un hechizo completamente dominado era aquel que no necesitabas palabras ni movimientos de varita para realizar, era tan imperceptible que pocos lo notarían y sin embargo, tan poderoso que se sentirían las consecuencias.

Sentado en el comedor de la mansión, su vista instintivamente se dirigió a Blaise, que sinceramente parecía un cachorro enfermo de amor y a su lado, la niña Rosier que habían conocido hace poco más de dos semanas, la cual se mantenía indiferente ante el niño.
—Eso me trae recuerdos de algo— pensó un Izar divertido, antes de aclararse la garganta, atrayendo la atención de la copia barata de alguna novela Muggle. —Y dime... Señorita Claire, ¿Estudias en Beuxbatonx?.
Enderezandose en su lugar, la mirada aburrida de la niña desapareció, viendo con respeto al que sería el futuro líder de su familia, su tía, la condesa Rosier y su gran hermano Alaric solo tenía más que palabras buenas y halagos para el niño, así que como era normal, ella admiraba al niño, ver el hechizo que había lanzado con tanta facilidad hace un rato solo la dejo más emocionada, jurandose a si misma llegar al mismo nivel que su primo.
—Entrare este año a Hogwarts.
La sorpresa en Blaise había sido prácticamente palpable, la niña ciertamente se veía de una edad idéntica a la suya, no esperaban que fuera un año menor y mejor aún, entraría en su escuela.
—¿Y tu casa?.
Cuestionó Blaise.
—No tengo una en particular, pero supongo que Ravenclaw estaría bien para mí. Escuche de mi gran hermano Alaric que el siguiente año va a ser una mier... Ecc... Va a ser terrible, sin el para mantener a raya a los idiotas...
Murmuró la niña tímidamente, casi había usado malas palabras en la mesa.
Tanto Izar como Blaise rieron suavemente, para nada importandoles esto.
—Tal vez lo sea. Pero no te preocupes, eso solo pasara en Slytherin. Y no por mucho tiempo. El control debe pertenecer a quien lo merece, es digno de el y puede manejarlo.
Su fría voz, con el borde peligroso y sus ojos que brillaron con un destello rojo les provocó escalofríos a ambos niños que lo veían, una sonrisa divertida lentamente deslizándose en las facciones de Blaise, ya anticipando lo que seguiría en el siguiente año. La sonrisa espeluznante de Izar dándole un adelanto.

The Black House Tempat cerita menjadi hidup. Temukan sekarang