— ¡Eso! — Ruslana dijo, que estaba sentada en la mesa de amigos — Bastante tienes con ser tan feo. Y encima tu primo es un infiel.
— ¡Retira eso! — Ignacio se levantó de la mesa.
— No quieras tener movida conmigo — Ruslana dijo — Soy de Bielorrusia. Sabía hacer llaves de yudo antes que gatear.
— Fantasma — otro de los primos de Roberto dijo.
— Eh — Álvaro se levantó — Deja a mi amiga.
— Maricón — dijo una señora mayor.
— Pues mejor ser maricón que estar tan amargada como usted.
— ¿Amargada, mi mujer?
— Tana, detén esto — Roberto dijo, subiendo al escenario para parar el video que aún seguía reproduciéndose.
— Deja a mi hermana — Violeta dijo, subiendo también al escenario.
— Ya decía yo que me parecía muy raro que estuvieras en un arbusto — Roberto dijo, entre dientes — Pensaba que simplemente estabas haciendo el tonto, pero veo que eres igual de mala que tu herma-
Roberto cayó al suelo, una mano sujetando su nariz. Violeta se giró a su lado, y vio a Chiara, agitando su brazo.
— Joder, que cara más dura tiene.
— Ha pegado a Roberto — Ignacio dijo, haciendo que todos miraran al escenario — ¡A por la guiri!
— ¡La guiri es una de los nuestros! — Martin gritó, y consiguió que los familiares de Tana se levantasen para detener a los de Roberto.
— Madre mía, la que se ha liado — Violeta dijo — Kiki, que te matan.
— ¿A mí? — Chiara se arremangó la chaqueta — Que lo intenten.
— ¡Suéltame el moño! — María, la madre de Roberto, gritó.
— Esto es por decir que mi vichisua no está buena — Susana tiró aún más de su pelo — ¡Y esto por criar a un impresentable!
— ¡Suelta a mi mujer! — Javier dijo.
— ¡No te acerques a mi mujer! — Juan dijo, pegándole un puñetazo.
— ¡Javier! ¡Que me va a dejar calva!
— ¡Si son extensiones! — Susana dijo — Igual de falsa que tu hijo.
Entre los primos de Tana y Roberto, se estaba empezando a formar una pelea. Ruslana, a un lado de esta, dio el primer puñetazo a uno de los amigos de Roberto, y la pelea pasó de ser a gritos, a ser a golpes.
— ¡Que se matan! — Violeta dijo, intentando ir hacia sus padres o sus amigos, pero Chiara la detuvo.
— Si te metes ahí te van a dar de todo menos las gracias — Chiara advirtió.
— ¡Están pegando a Denna!
— No, Denna está pegando a alguien — Tana dijo, entrecerrando los ojos para ver mejor.
— Tiene mucha estamina — Chiara dijo.
Violeta se giró a mirarla, pero escuchó el grito de dolor de Ruslana y se deshizo del agarre de Chiara para ir hacia la chica — ¡Con mi pelirroja no!
— ¡Violeta! — Chiara dijo, llevándose las manos a la cabeza. Se giró y vio a Juan en el suelo, con Javier a punto de subirse encima de él — ¡Suegro!
Chiara corrió hacia ellos, y empujó a Javier contra el suelo. Ayudó a Juan a levantarse, y este se apoyó en ella por unos instantes. Miraron como Javier se quedó en el suelo, con una mano en el pecho — Vete a por mi mujer.
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Mentiras de Jarabe | KiVi
RomanceChiara y Violeta son compañeras de piso, y no se llevan bien. Discuten a menudo, y cuando no lo hacen, se ignoran. Cuando se adelanta la boda de su hermana, y Violeta se niega a ir sola y escuchar a su madre preocupada por su soledad, decide engañar...
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