🥀El Reino Erudito🥀

🥀37🥀

Él tomó su pene y bajó lentamente este presionando despacio, me miró sonrojado y se acercó a mi metiendolo lentamente.

Abrió su boca enseguida y se apoyó en mi pecho gimiendo al instante.

Tragué duro sintiendo como abría mi vagina lentamente, él gimio metiendo todo su pene enseguida.

Leviatán - Que bien se siente~

Lo miré enseguida viendo como mordía su labio sonrojado.

Leviatán - Que caliente es...

Sonreí y lo abracé besando su cuello despacio, él empezó a moverse enseguida, gimiendo por cada roce que daba en mi interior.

Su pene es perfecto maldita sea...

Leviatán es tan perfecto que es imposible no sentir envidia.

Él me miró sonrojado y observé atenta aquel mirar lleno de extasis. Sus ojos brillan de una manera hermosa.

Leviatán - Creo que el sexo no es tan necesario. -Murmuró-

Me quedé en silencio viendo sus ojos fijamente.

Leviatán - Pero cuando es con una persona importante creo que empieza a ser una buena forma de demostrar sentimientos, ¿no?, da envidia.

Él ladeo un poco su cabeza viéndome a los ojos, yo permanecía inmóvil, viendo su rostro pálido y perfecto.

Leviatán - Creo que por eso nunca tuve demasiado interés en este.

Se acercó aún más a mi y besó mi mejilla despacio.

Leviatán - Creo que en realidad solo estaba esperándote a ti, eres mi esposa, la única capaz de ver mi cuerpo entero.

Mi corazón se aceleró al segundo.

Leviatán - La única que tiene el derecho de dirigirme la palabra libremente, de tocarme y besarme las veces que desee.

Me gusta...

Leviatán - No sé como tener sexo, y tampoco sé qué hacen los esposos exactamente. -Dijo serio-

Tragué duro viendo su cabello moverse por la brisa que entraba desde el balcón.

Leviatán - Pero mis hermanos han tenido muchas Demonios, he visto bastante.

T/n - Leviatán...

Sonreí levemente y lo acerqué a mí besándolo, él se apoyó en mi lentamente, recorriendo mi boca sonrojado.

Me di la vuelta con fuerza dejándolo debajo mio, él se quejó levemente en mi boca y me aparté viendo sus ojos grises.

T/n - Tampoco sé mucho de esposos, pero soy buena consintiendo a Demonios cuando se portan bien. -Sonreí-

Me senté metiendo más profundo su pene, él abrió levemente su boca y miró atento nuestros cuerpos unidos.

T/n - Puedo mostrarte lo que sé hacer.

Empecé a saltar enseguida, él curvó su espalda al segundo gimiendo, sonrió y mordió su labio viéndome atento.

Leviatán - Se siente muy bien...

Sonreí y apoyé mis manos en su pecho saltando rápidamente, Leviatán gimió apretando mis muslos con fuerza, yo sonreí y tomé sus cuernos escuchando sus gemidos.

Saltaba cada vez más rápido viendo su rostro lleno de placer, masajeando sus cuernos tan humedos y sintiendo su pene cada vez más erecto en mi interior.