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Todos bailaban, reían y bebian felices, el segundo día había llegado, por lo que nuevamente la celebración debía ser digna.

Los únicos sentados eramos nosotros...

Mamá me miraba desde su trono totalmente seria, como si continuara diciendome cosas únicamente con esa mirada de rechazo y odio.

Peleó bastante conmigo después, por el hecho de quedar embarazada.

Cosa que no estoy...

Pues Satan no estaba bajo el efecto de Asmodeo y yo no ovulo a menos que él meta ese líquido extraño en mi boca.

Una Demonio solo es fértil los días que ovula o cuando otro Demonio la hace ovular.

Ahí puede ser ese líquido negro, o Asmodeo, quién con tocarte y si él lo desea, te hace ovular.

Pero ese maldito hechizo solo inducia a los Demonios a el deseo carnal y de reproducirse, Taehyung si podía embarazarme, Satan no.

Aunque estuve bajo ese efecto, en nosotras solo provoca deseo.

Jinso - Era de esperar...

Su voz hizo que la miraramos enseguida, ella me miró seria, manteniéndose de piernas y brazos cruzados.

Jinso - Se sabía que arruinarías todo, te gustan los Demonios y estamos rodeados de estos, era obvio que te ibas a descontrolar.

Gyoru - Mamá te odia.

Meru me miró en silencio y volvió a mirar sus manos seria, sin decir una sola palabra.

Taehyung también, continuó callado sin decir nada.

Jinso - Es más...

Ella me miró fijamente y señaló seria.

Jinso - Comienzo a creer que fingiste estar bajo el control de Astaroth para estar con él.

Al oír eso mi corazón se detuvo unos segundos, yo giré lentamente la cabeza y la observe fijamente.

Jinso - Te veías demasiado contenta encima suyo, debiste haberlo disfrutado demasiado y como te gustan los Reyes, amaste ser besada por Asmodeo, ¿no es así, zorra?.

Me levanté en un simple movimiento, Taehyung me tomó del brazo y yo lo golpeé con mi ala apartandolo de mi con fuerza.

Mi corazón late demasiado fuerte, mi puño arde.

Jinso - Sólo digo la verdad. -Me sonrió- ¿Qué pensarán de ti al saber lo que hiciste adelante de todos estos Demonios?, ¿también quieres ser penetrada por ellos?.

T/n - Cállate, tú no sabes lo que pasé...

Jinso - Uy si, seguro fue horrible, tanto que gemiste en todo este maldito salón, dime, ¿también quieres acostarte con Lucifer?.

Eso había sido suficiente...

Yo tomé a Jinso del cabello cargando mi brazo de energía maldita, aumentando la fuerza en este para lanzarla con toda la ira que tenía acumulada.

Cuando la solté ella salió volando a gran velocidad contra las mesas de comida, arrastrando todas con su cuerpo a la pared.

Todos dejaron de hacer lo suyo, la música paró y las miradas se dirigieron a ella, quién se había estrellado contra la pared hundiendo esta por completo.

Mamá ya estaba de pie...

Jinso escupía sangre tocando su abdomen sin poder salir de la pared, estaba tan incrustada en esta que le era imposible moverse.

🥀El Reino Erudito🥀 Where stories live. Discover now