🥀El Reino Erudito🥀

🥀30🥀

Él respiraba agitado sobre mis muslos, no había hecho absolutamente nada, pero mis palabras al parecer lo habían excitado.

Sus cuernos goteaban, su mirada extasiada se posaba sobre mi y aquella erección palpitante cada vez crecía más en su pantalón ajustado.

¿Cómo es posible?.

Subí mi mano acariciando su cabello, él se quejó levemente viéndome atento, subí un poco esta tomando uno de sus cuernos.

Leviatán gimió y yo tragué duro tomando ambos para comenzar a apretar y frotar estos.

Él cerró sus ojos con fuerza, gimiendo ante lo que hacía.

Están tan humedos que se me resbalan las manos...

Miré a Leviatán un instante y sonreí viendo aquella expresión tan extasiada.

T/n - ¿Te gusta verdad?.

Leviatán curvó su espalda quejándose y bajé la mirada, él abrió su pantalón y bajó este manchando su pelvis con semen.

Observé asombrada este.

Es hermoso...

Él aflojó sus manos sonrojado y cerró sus ojos agitado.

Subí su camisa viendo su pelvis atenta.

No posee musculos de nada, su cuerpo es totalmente delicado.

Solté sus cuernos lentamente y agarré su pene, él se quejó y me miró al instante.

Me subí arriba suyo y senté encima de este, comenzando a frotarme rápidamente, él mordió su labio y cerró sus ojos sonrojándose más.

T/n - Mírame.

Abrió lentamente sus ojos y me observó agitado, él bajó lentamente la mirada y apretó su camisa.

Leviatán - Se siente bien...

T/n - Tienes tantos hijos, ¿cómo lo haces?.

Leviatán - Me toco...

Lo miré detalladamente viendo su expresión tan lujuriosa.

T/n - ¿Cómo?.

Me bajé de arriba suyo y me quedé de rodillas entre sus piernas.

T/n - Muéstrame.

Apoyó una mano en el piso levantándose un poco y con la otra tomó su pene masturbandose lentamente.

Él gimió y me miró detalladamente.

T/n - ¿Siempre es así?.

Leviatán asintió despacio, él apretó su pene con fuerza y tragué duro al ver las venas marcadas en su piel pálida.

T/n - ¿Y en qué piensas?.

Leviatán - En mi.

Sonreí enseguida viendo la seriedad en sus palabras.

T/n - ¿Si?.

Él asintió despacio.

Leviatán - Me siento frente a un espejo, y simplemente me observo.

Bajé la mirada viendo como se tocaba rápidamente.

Leviatán - Pero no he vuelto a pensar en mi al hacerlo.

Lo miré enseguida viendo su sonrojo.

Leviatán - Pienso en ti. -Dijo serio- Eres más hermosa que yo.