gemelas

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Alfonso se separó de Any cuando escuchó sonar el celular.

Poncho: ¡¿Ucker?! - Se sorprendió y respondió. -¡¿Oye?!

Dulce: Poncho... Oh, me alegro de que hayas respondido, lamento llamarte al teléfono celular de Ucker, pero no sabía tu número y...

Poncho: Dulce (Any lo miró sorprendido) ¿Por qué lloras? ¿Por qué hablas del celular de Ucker, está contigo?

Dulce: Estoy en un hospital con él, le están haciendo algunas pruebas en este momento y...

Poncho: ¿Exámenes? ¿¿Qué pasó? ¡Habla con calma!

Dulce: Llegó a su casa borracho, hablamos y cuando fui a llamarle un taxi, él... Cruzó la calle y fue atropellado, no sé si está bien, se desmayó, no se despierta y no dan noticias.

Poncho: Está bien, cálmate, ya vamos... ¡¿En qué hospital estás?! -preguntó y miró fijamente a Any. - Bien, nos vemos desde aquí. - respondió y luego colgó.

Any: ¡¿¿Qué pasó?!

Poncho: Ucker fue a la casa de Dulce y terminó teniendo un accidente, ella está en el hospital con él y vamos para allá.

Any: Gracias... Debe estar preocupada, ¿estaba llorando por teléfono? - preguntó, poniéndose de pie.

Poncho: Bueno, cuando lleguemos allí, ella podrá explicar mejor lo que pasó.
Cuando llegaron al hospital, Dulce abrazó a Anahí al verla.

Dulce: Me alegro de que estuvieran juntos.

Any: Muy bien, mantén la calma.

Poncho: ¡¿¿Qué pasó?!

Dulce: Él... Se fue a casa borracho, quería hablar conmigo y le pedí que se fuera, le dije que iba a llamar a un taxi, pero cuando entré a buscar el teléfono y llamar cruzó la calle y fue atropellado... El conductor nos trajo porque estaba demasiado asustado para conducir. - respondió angustiada y con los ojos enrojecidos.

Poncho: ¿Nadie ha dado ninguna noticia todavía?

Dulce: No. - negó con la cabeza angustiada.

Any: ¡Cálmate, no te pongas nervioso así ok! Él sonrió mirándola fijamente.

Dulce: Lo intentaré... Es sólo que... El susto fue tanto que solo podré calmarme cuando vea que está bien.

Poncho: Voy a la recepción a ver si dicen algo, me quedo con ella ta?

Any: ¡Gracias!

Poncho: ¡Ya regreso! - respondió dándole un beso en la frente a Any y se alejó.

Dulce: Maldita sea, siento que fue mi culpa. - gimió.

Any: No te preocupes, todo irá bien. - respondió él y la abrazó.

Dulce: Any que quiera que esté bien. - respondió con los ojos llorosos.

Any: Se quedará, no te preocupes. - respondió acariciando el cabello de su amiga, segura de que toda esa preocupación significaba una cosa: amor.

Giovanna llegó a casa y se tiró en el sofá exhausta.

Marichello: Hija, me alegro de que hayas aparecido, hice esos rollitos de jamón, queso y catupiry que te encantan.

Giovanna: Mamá ya ha dicho que no puedo comer estas cosas.

Marichello: Pero siempre ha sido su favorito.