Capítulo 23.

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Y ella lo deseaba tanto. De pronto se encontró imaginando escenas eróticas que la invadía sin poder evitarlo, una experiencia nueva para ella. Él le evocaba sin el menor esfuerzo la pasión vivida la noche anterior. Ni siquiera le tenía que decir palabras bonitas ni cumplidos. Unos pocos besos, y ella se transformaba en su juguete sexual, en una muñeca capaz de atender todas las demandas. Esa imagen le dio fuerzas para apartarlo de ella.

—Tengo que hablar contigo. Y pienso que es mejor que vayamos adentro.

—Podemos hablar en la cama —la miró él con descaro.

—¡Si te acabas de levantar de la cama!

—Pero estoy deseoso de volver allí.
Y _____ se daba cuenta de que ella también lo deseaba. Que sus pezones se habían endurecido, que el calor volvía a su cuerpo.
Y que si bajaba la guardia un segundo, él se aprovecharía de su debilidad.

—Me parece que eres demasiado sexuado.

—¿Te estás quejando? —dijo él sonriendo.
_____ se hundió en el sofá.

—¡Dios mío! ¡Tus pies no tocan el suelo! —se rió Justin, sentándose frente a ella— Habla, entonces.

—He estado pensando...

—¡Peligroso! Es una costumbre que debes cambiar, ésa de pensar —interrumpió Justin burlonamente— Acerca de ese certificado...

—¿Y qué tenemos que hablar acerca de ese certificado?

—Debemos encontrarlo. Y he pensado que tal vez puedas darme alguna idea del contenido del certificado.

—¡No! —dijo él cambiando totalmente el humor.

—Cuanta menos gente lo sepa, más segura está mi familia.
Por lo que se veía ella no formaba parte de su familia.

—No confías en mí.

—La confianza no juega ningún papel en este caso.

—Y la persona en la que menos confiarías es en la hija de Max Harrington.

—No he dicho eso.

—No hace falta. Me has tratado como si fuera una leprosa durante mucho tiempo.

—El pasado es pasado ya.

—¿Cómo puedes decir eso si estás dispuesto a que yo conviva con él? Pensé que tal vez si supiera algo podría ayudarte a encontrar ese certificado —dijo ella apenada.

—¡Ah! Ahora lo entiendo. Lo quieres como pasaporte a tu libertad. Crees que con ese certificado en mi poder te dejaré marchar.

—¿No es eso lo que quieres tu también?

—¡Lo quería desesperadamente hace cinco años! Y hace una semana pensé que tenía ese certificado. Pero algo ha cambiado en mí desde que descubrí que esa caja no lo contenía. Pensé que era el final de un asunto. No quiero perder el tiempo en una búsqueda infructuosa. ¡Se terminó todo!

—No —dijo ella reprimiendo las lágrimas— No ha terminado, mientras aún estemos juntos.

—Eso no era lo que pensabas mientras hacíamos el amor. O cuando te morías de placer en mis brazos.

—Por favor... —dijo indefensa ante la acusación.
Justin se acercó a _____ y le rodeó los hombros con las manos.

—Cuando estás en la cama conmigo eres caliente como el mismo fuego. Te gusta todo lo que te hago. Te gusta todo lo que te doy. Y lo que te hago sentir. Conmigo te abandonas, pierdes el control, te mueres de deseo...

—¿Cómo puedes hablarme de ese modo? —_____ se estremeció ante sus palabras.

—¡Puedes ser una prostituta en mi cama, y no me importa nada cómo eres en la cocina o en el salón! —dijo con énfasis a la vez que la miraba profundamente— Pero quítale de encima esas fantasías adolescentes de amor verdadero con Woods. No ocurrirá jamás mientras yo esté vivo. Eres mi mujer. ¡Hazte a la idea antes de que pierda la paciencia!
Justin dio un portazo. Ella entonces respiró.
_____ pensó entonces que tal vez sería mejor decirle la verdad a Justin acerca de Paul. Pero la idea, después de las duras palabras de Justin, no la convencía.
"Caliente como el fuego", "abandonada, una prostituta..." Tenía razón. Se había rebajado a un nivel absolutamente primitivo, se había dejado quitar sus principios, su decencia, su inhibición. Y entre esos principios figuraba el principal: para ella no podía haber sexo sin amor.
Bueno, Justin podía volver a sus chicas guapas. A ella le daba igual. ¡No era cierto! La idea de Justin con otra mujer le resultaba intolerable.
Con un sollozo ahogado, _____ abandonó la habitación. 

Un matrimonio diferente.Where stories live. Discover now