Capítulo 16.

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—Te has quedado como si necesitaras un trago, un trago fuerte.
Con asombrosa calma, Justin se puso de pie y fue a servirle un coñac. Se lo puso enfrente, sobre la mesa y se fue hacia la chimenea.

—No es posible que hables en serio —le dijo _____ con la boca seca.

—Aparte de tu árbol genealógico, que deja bastante que desear, tú eres una esposa perfecta, lo que yo busco en una esposa.

—Perdóname, pero no puedo creer lo que dices.

—Eres guapa, atractiva, y ya eres mía desde antes —dijo sonriendo— Y no he encontrado a otra con la mitad de las cualidades que tú reúnes.

—Gracias, pero no, gracias —_____ no podía entender su sarcasmo, y su proposición la dejaba perpleja.

—No he dicho que tuvieras derecho a rechazar mi proposición. Y estoy dispuesto a ser razonable. Lo he demostrado anoche. Podría haberte tirada en la cama y...

—¡No! —_____ se puso rígida en la silla.

—Pero no lo he hecho. Te he dado tiempo como para que te hagas a la idea. No pretendo que te comportes como si los cinco pasados años no hubiesen existido.

—Amo a Ryan.

—Y yo espero no volver a oír su nombre. Te lo advierto. Te tolero un error, pero no más.

—¡No puedes hacerme eso! ¡No puedes amenazarme!

—No era una amenaza. Si te saltas las barreras que he trazado, tendrás que atenerte a las consecuencias. Y no digas que no te he avisado. No pienses que porque he sido tolerante anoche lo volveré a ser.

—No puedes obligarme a estar contigo.

—Intenta saltarte las barreras, y verás. Y no te engañes con que has encontrado el verdadero amor. Woods tiene una larga trayectoria en el arte de cazar mujeres ricas.

—¡Si ni siquiera sabía que yo era rica! —gritó _____ furiosa.

—Hasta un ciego lo vería. Mira las joyas que llevas, la ropa que usas. ¿Por qué crees que vas con guardaespaldas? Eres una invitación para cualquier asaltante. La pulsera que llevas puesta vale más de lo que cualquiera de ellos pudiera ganar en toda su vida. Y no creo que se imagine que vas a donar toda tu herencia.

—¿De verdad?

—¿Es que quieres conservarla? ¿Las ganancias de todo el dolor y amargura que causó a sus víctimas?
_____ estaba descompuesta por las palabras que oía. Con una mirada de desprecio se dio la vuelta y se alejó de él.

—Volverás a Londres y harás el equipaje. Nos vamos a Grecia en cuarenta y ocho horas.

—¿A Grecia?

—Sí. Ya es hora de que conozcas a mi familia.

—¡De ningún modo seguiré casada contigo, y de ninguna manera me iré a Grecia!

—Ve a darte una buena ducha, y piensa mientras tanto cuáles son tus opciones —le aconsejó Justin secamente— Y cuando termines, piensa entonces cuánto has pensado en Woods anoche, cuando estabas en mis brazos.

—¡Cerdo! —era una palabra que no le gustaba a _____ pero le salió espontáneamente, sin pensarlo.

—¿Y por qué me llamas así?
_____ se quedó paralizada ante la mirada de hielo de él.

—¿Por qué? —insistió él.

—Bueno, ¿y por qué no, si lo eres? —por fin dijo ella.

—Puedo soportarlo —hizo una pausa y agregó— _____, podemos formar un buen matrimonio. Métetelo en la cabeza.

—Debes de estar bromeando.

—Sé que quieres seguir con el papel de víctima, le has tomado simpatía, pero te estoy pidiendo que nos des una oportunidad.
_____ podía adivinar en los rasgos de Justin la tensión de un orgullo doblegado, como si en la proposición que acababa de hacer de algún modo lo perdiese.
_____ no quiso verse afectada por el cambio emocional en Justin. Por lo que, en silencio, se alejó de él rápidamente.

—_____, ¿quieres la información que tengo de Woods?
_____ sintió que se le revolvía el estómago. ¡Dios, Justin no tenía escrúpulos! ¿Cómo había averiguado tantísimas cosas acerca de Paul la noche anterior? Los datos personales sobre Paul podrían ser ciertos, pero lo demás no eran más que mentiras. El tipo de mentiras que Justin podía inventar cuando estaba dispuesto a lograr un objetivo. Y estaba claro que quería rebajar a Ryan, y que ella perdiera la fe que había depositado en él. Pero Justin no se daba cuenta de lo fuerte que era ese amor. ¿Qué sabía el sobre el amor? Jamás lo había tenido en cuenta, ni para casarse ni para sus relaciones extramatrimoniales. Justin no podía comprender su relación con Ryan. La escuchaba, la animaba, estaba interesado en ella, la cuidaba. Y no estaba dispuesta a perder la oportunidad que la vida le había dado de amar y ser amada.
Justin podía encontrar muchas mujeres que pudieran cumplir los requisitos de una esposa para él. Una esposa guapa, atractiva, incluso una esposa que cerrara los ojos ante las infidelidades, algo que las mujeres, según él, no podían comprender.
Durante el vuelo a Londres un dolor de cabeza intenso se apoderó de ella. Atravesó el aeropuerto a tientas, y prácticamente llegó arrastrándose hasta su casa. La criada, al verla llegar con esa cara, rápidamente cerró las cortinas y la ayudó a acostarse. En la soledad, _____ lloró amargamente, sin pensar en nada, simplemente lloró y lloró. 

Un matrimonio diferente.Wo Geschichten leben. Entdecke jetzt