Nunca Se Sabe

CAPÍTULO 26

JASON

Aburrido y cansado en estos cuatro días de descanso que tenemos. El otro día salí a comprar a la tienda de al lado de casa algún ramyeon y ayer salí a comer con Ta-Go y Seung. Me acuerdo perfectamente de ese día como si fuera ayer. Hacía mucho frío y empezó a llover un poco para luego parar y dejar las calles de Seúl con un olor especial a tierra. Así que, por el frío decidí meterme debajo de las cobijas mientras revisaba las redes sociales. Había jugado todos los juegos que tenía en mi móvil y hasta me descargué otros juegos para pasar el tiempo.

Iba navegando en las redes sociales hasta que llegué a una publicación que me pareció interesante en la que un chico hablaba de una vidente en Seúl muy famosa por su espléndido trabajo. La mayoría de los comentarios eran positivos, ya que todos decían que todo lo que les había dicho la vidente, se había cumplido.

La verdad me daba curiosidad. ¿Y si yo también pudiera saber sobre mi futuro? ¿Y si yo también pudiera saber quién podría ser mi media naranja? Fue en ese momento que me puse a buscar el típico comentario sobre la localización de la vidente. No podía creer lo que veía. La ubicación estaba muy cerca de nuestra casa. Quiero decir que estaba a pocas calles atrás de casa. Todas las señales llevaban a solo un camino. Debería ir a probar mi suerte con esa vidente. No pierdo nada por probar...

        - ¿Yeong, has visto mi sudadera negra? -Pregunté a Yeong que estaba tumbado en su cama. 

        -Mira en la cesta de la ropa limpia. Creo haber visto una hoy por la mañana. -Me dijo él sin quitar la mirada de su móvil.

        - Okey, gracias. -Dije.

        - ¿Dónde vas, hyung? -Me preguntó Ta-Go entrando a la habitación donde él también dormía.

        - No te lo voy a decir. -Respondí mientras me levantaba de mi sitio.

        - ¿Por qué? -Me dijo actuando mono.

        - Porque te vas a reír de mí. -Dije serio.

        - Es una chica. -Dijo Yeong riendo.

        - No. -Dije serio.

        - ¿Cómo? ¿A quién vas a ver? -Preguntó Ta-Go sorprendido. En ese momento, entró Hyeon que desde lejos podías ver que estaba aburrido.

        - ¿Qué pasa? ¿A dónde vais? -Preguntó apoyándose en el marco de la puerta de la habitación.

        - Jason va a salir a ver a alguien que no es una chica y no nos quiere decir nada. -Dijo Yeong.

        - ¡¡Ohoo!! -Dijo Hyeon interesándose por la conversación.

        - Venga, ¿quién es? -Dijo Ta-Go haciendo pucheros.

        - Jolines... ¡Qué pesados! Voy a ver una vidente. ¿Felices? -Dije frustrado porque no me dejaban en paz.

        - ¿Eh? -Preguntó Yeong extrañado.

        - ¿Cómo? -Preguntó Ta-Go sin entender nada.

        - ¿Eh? ¿Vidente? -Dijo Hyeon mirando con la misma expresión que los demás. De repente, se empezaron a escuchar carcajadas por parte de Ta-Go y Yeong.

        - Y por eso no lo quería decir. -Dije mientras los más pequeños seguían riéndose.

        - ¿Y eso? -Me preguntó Hyeon.

        - ¿Eso qué? -Cuestioné.

        - ¿Por qué vas a ver una vidente? -Preguntó Hyeon curioso.

        - Porque quiero saber sobre mi futuro y dicen que es muy buena en su trabajo. -Dije.

        - Yo te acompaño, que me aburro en casa. -Dijo Yeong levantándose de la cama para dirigirse al armario.

        - Yo también quiero ir. Voy a grabar que es lo que te va a decir para reírme después. -Dijo el más pequeño.

        - Ta-Go eso no. ¿Qué pasa si lo sabe? -Expresé preocupado.

        - Si lo escondo bien, no lo va a saber. -Dijo Ta-Go divertido.

        - Bueno, es vidente, ¿no? -Dijo Hyeon para reírse más. De verdad, me están tomando el pelo.

        - ¡¡Hyeon hyung!! -Chillé.

        - ¿Qué? -Me respondió despreocupado.

        - Voy a vestirme. -Dije para tirar la toalla con los chicos.