CAPITULO 22

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Se comenzaron a escuchar pasos afuera las demás esclavas se despertaron una de ellas se levantó de su cama, pero abrieron la puerta unos soldados trayendo a la doncella toda ensangrentada con su ropa cortada se quedó parada en la puerta mientras los soldados la cerraban la esclava que se había levantado se acercó a ella para ayudarla a caminar hasta una de las camas la doncella se sienta sobre la cama de alfalfa mientras que la esclava trae una cubeta con agua y un paño húmedo la comienza a limpiar la sangre de su rostro las demás esclavas murmuran al final de la habitación diciendo "como la desfiguro ese mal nacido". La doncella temblando y llorando de dolor comienza a gritarle a la esclava "que pare ya no aguanto más esta humillación". La esclava solo le dice "que la quiere ayudar, solo déjame limpiarte". Cuando llega a su entrepierna, la esclava refleja un rostro adolorido, la mira a los ojos a la doncella para decirle "te lastimo toda ese hijo de puta, esto te va a doler, pero va a ser lo mejor para ti". La doncella le grita "no por favor déjame así me duele mucho". Le suplicaba, pero la esclava aún insiste que debía limpiarse bien la parte que él más toca y así prevenir enfermedades, "solo quiero que sepas que estoy ayudándote todas, aquí somos tus amigas confía en nosotras". La doncella se dejó ayudar para así sentirse mejor, volví a dormir para olvidarme esas terribles escenas, la doncella está en buenas manos con las demás esclavas al despertarme a la mañana llego un carruaje con dos personas ancianas dentro el chofer les ayuda a bajar el emperador les da la bienvenida con mucho entusiasmo parece conocerlos quise caminar enfrente de ellos para escuchar a qué vinieron aquí, pero la señora anciana me detuvo diciendo detrás de mis espaldas "que hace una esclava descalza así en el palacio hijo". Parece que son los padres del emperador, él se nota una persona amable enfrente de ellos, el emperador se para detrás de mí agarrando de mi cabello disimuladamente para que su madre no lo pueda ver cuando me está maltratando.

Esclava finge que a ti te gusta estar en estas condiciones si no, no volverás a ver la luz del sol nunca más en tu perra vida  -dijo el emperador.

Señora, a mí me gusta estar así me siento más cómoda, gracias, igual por su preocupación, le agradezco mucho -dijo Amy dándole la espalda a la señora.

El emperador sale detrás de mí acercándose a su madre para decirle "en varias ocasiones intente que la esclava utilizaras prendas adecuadas de su trabajo, pero como verás a ella le gusta estar así debe ser porque viene de una familia muy pobre y la costumbre no se quita muy fácil". La señora me queda mirando fijamente, se acerca a mi toma de mis manos y me dice mirando a mis ojos "hija, estás segura de que quieres estar en estas condiciones, tienes un rostro muy bonito y un cuerpo excepcional, podrías ser una doncella". Le dije que mi madre lo fue antes de tenerme a mí, pero yo no quiero eso prefiero, estás así le solté las manos, me fui caminando dándole la espalda entre al lugar de las cosechas para comenzar mi trabajo como todos los días al parecer se dieron cuenta de que provengo de familia real solo que caímos en la pobreza el emperador entra al lugar de los cultivos para acercarse ami agarrarme del cabello provocándome dolor con mis manos trate de quitarle las suyas, pero es más fuerte que yo.

Maldita perra como te atreves a darle la espalda a mi madre sabiendo que se preocupa por ti, por lo menos alguien quiere tu existencia, pero no será por mucho  -dijo el emperador.

Por favor su majestad le suplico que me suelte tenga piedad de mí, solo soy una chica adolescente que aún está aprendiendo de la vida -dijo Amy.

Yo te voy a dar un castigo que vas a aprender muy fácil las cosas de la vida en un segundo -respondió el emperador.

Dándole orden a sus soldados de que me ataran al árbol para azotarme unas diez veces, me agarraron llevándome, me resistí todo lo que pude gritando, ¡ayuda!. Los padres del emperador escucharon mis gritos de desesperación, salieron del palacio para ver que me estaban atando a un árbol, la señora se acerca al emperador para decirle  "que es esto que está ocurriendo porque atan a la pobre esclava indefensa a ese árbol para azotarla". El emperador solo le responde, "no cumplió una orden como debe ser, tiene que ser azotada, así aprende". La señora enojada entra al palacio con mucha prisa, el emperador se acerca. Ami agarra de mi rostro, me mira fijamente a los ojos.

No puedo creer que un rostro tan bonito como el tuyo ocasione tantas discusiones -dijo el emperador.

Mientras tocaba mi silueta con su otra mano comenzó a besarme cada parte de mi cuello aparte mi mirada hacia otro lado, pero él me agarro el rostro para decirme "mírame fijamente a los ojos maldita esclava aquí yo soy tu amo y, por lo tanto, puedo hacer lo que quiera contigo aún me retengo porque sé que no tienes la edad suficiente para servirme, pero tu aroma y tu piel me llaman al deseo se me hace imposible no querer besarte quisiera azotarte yo mismo, pero en mi lecho ver tu cara de sufrimiento, pero a la vez de un deseo ardiente por mi cuerpo sé que tú también te resiste porque no te gustan mis tratos, pero en el fondo sé que quieres descubrir los placeres que un hombre te puede dar". Él se retira dándome la espalda, los soldados se marcharon dejándome solo atada por unas horas hasta que mi cuerpo se agote, de tanto estar en el rayo de sol sin agua y comida hasta que se me secaran los labios y suplicara que por favor me desataran de ese árbol.

MALTRATOWhere stories live. Discover now