Segunda oportunidad

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Al día siguiente de estar los dos dormidos en el sofá, Irene fue la primera en despertar y ver a su lado a Jackson quien seguía dormido. Ella decidió no levantarse del sofá y solo observarlo, hasta que fue interrumpida por el abrazo y voz de él.

Jackson – Yo sé que es inevitable que me veas, pero debes dejar de hacerlo. Dijo mientras sonreía y abría sus ojos para ver a Irene.

Irene – No te estaba mirando. Dijo al evitar todo contacto visual con él.

Jackson – Estoy muy seguro de que lo hacías, pero te dejaré hacerlo. Solo por ser tú. Dijo al darle un beso en la frente.

Irene – Creo que ya debo irme. Dijo al revisar la hora en su celular mientras se sentaba en el sofá para después levantarse de este. – Nos vemos después.

Jackson - ¡Espera un momento! ¿No quieres desayunar? Pregunto al tomarla de la mano y caminar detrás de ella.

Irene – Es mejor si desayuno en mi casa. Dijo al deshacer el agarre de Jackson. – Te veré después.

Jackson - ¿Puedo preguntarte algo? Pregunto al verla recoger sus cosas y caminar a la puerta de salida.

Irene – Si, claro que puedes.

Jackson – ¿Te arrepientes de haberte quedado a dormir?

Irene – No, por supuesto que no. Dijo al acercarse a él. – No me arrepiento de eso, decidí hacerlo porque en verdad lo quería.

Jackson - ¿Entonces por qué siento que al salir por esa puerta vas a comenzar a evitarme?

Irene - ¿Puedo ser honesta contigo? Pregunto al tomarlo de la mano e invitarlo a sentarse de nuevo en el sofá

Jackson – Si, siempre.

Irene – Desde que te vi en el bar no he sentido nada más que felicidad y alivio de verte bien.

Jackson – Yo también me sentí así.

Irene – Pero mi lado racional me dice que, lo mejor fue habernos separado todos esos meses. No éramos buena compañía para el otro.

Jackson – Claro que fue lo mejor, pero los dos hemos aprendido y trabajado mucho en nosotros. No somos los mismos que hace meses, estamos en mejores condiciones.

Irene – Si, lo estamos.

Jackson – ¿Entonces podemos salir hoy e intentar pasar el día juntos?

Irene – Si, podemos hacerlo. Pero debo regresar a mi departamento para arreglarme y cambiarme de ropa.

Jackson – Está bien, pero tenemos que desayunar algo y después yo mismo te llevo a tu departamento. ¿Estás bien con eso? Dijo al levantarse del sofá y extender su mano a Irene

Irene – Si, desayunemos. Dijo al levantarse y tomar la mano de Jackson para caminar a la cocina.

De esa forma los dos desayunaron juntos mientras hablaban sobre cosas nuevas de sus trabajos y los nuevos proyectos para ambos, también sobre el lugar al que irían de cita, acordando la hora para verse de nuevo y así poder darse una segunda oportunidad.

Un par de horas después de Jackson haber dejado a Irene en su departamento para que ella comenzará a arreglarse, él manejo a su sesión de terapia y luego a su casa, para poder terminar de arreglarse a tiempo y así manejar al departamento de Irene.

Cuando la hora acordada llegó, Jackson le informó a Irene que ya se encontraba fuera de su departamento, al exterior de su auto con un pequeño ramo de flores en su mano, esperando por ella. Que minutos después de recibir la llamada de Jackson, apareció frente a él con una gran sonrisa, abrazándolo con fuerza mientras le agradecía por el ramo.

Cruel -Jackson Wang-Where stories live. Discover now