Disculpate.

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Aunque durante la cena no es como que se la pasaran de maravilla ya que tuvieron que soportar las críticas pasivo agresivas de los padres de Esteban hacía literalmente todo, prefirieron contenerse ya que estaban los niños presentes y no querían hacerlos pasar un mal rato pues ellos se veían muy contentos porque toda la familia se encontraba en el mismo sitio, además las ocurrencias de su tía Lu hacían más divertido todo también, para cuando fue hora del postre, Marcia y Esteban se encargaron de servirlo, de paso podrían hablar un poco sin mencionar tranquilizarlo.






– No tendremos que verlos el fin de semana — murmura — Piensa en eso

– No me gusta que te estén criticando y a los niños

– También critican a tus hermanas, cielo no les des cuerda, es lo que están buscando, la única razón por la que sugerí hacer esta cena es porque así tendría mi fin de semana libre — le entrega algunos copones con el helado — Llevalos a la mesa

– Bien, ya voy






Al regresar a la mesa el postre también fue ligeramente criticado pero esta vez por su suegra, a Marcia no le importo pues ella si estaba disfrutando su helado de vainilla con nueces y abundante caramelo, así como el resto en la mesa, en cierto momento le tocó tomar la mano de Esteban cuando una vez más se trajo el asunto de que Marcia estaba de "vacaciones" no lo iban a superar nunca claramente.






– Debió ser un golpe duro lo que sucedió para que te tomarás un descanso, ayer Javier nos contó, debieron decirnos algo para poder ayudarlos o mínimo estar pendientes

– Era una situación que estaba lejos de nuestro control, no quisimos involucrar a nadie más porque era un tema delicado además de peligroso

– Aunque la verdad la teoría de que estuvieras embarazada me parecía mucho más creíble, ustedes guardan secretos toso el tiempo

– Abue mami no tiene eso — dice Rafa con su boquita llena de helado

– ¿Y qué tiene corazón?

– Mamá ya cambiemos de tema — insiste Esteban — Lo hemos explicado miles de veces

– ¿Qué ibas a decir Rafa? — sonríe limpiandole la boca con una servilleta

– Mami tiene un bebé en su pancita, no un embirrezo o como se diga





En la mesa se instaló un buen silencio por unos segundos hasta que el pequeño se dio cuenta de lo que había dicho y comenzó a disculparse, incluso bajo de su silla para ir a disculparse con su mami.





– Perdón mami

– Mi amor está bien — soba su espalda

– Pero no tenía que decir todavía, perdón

– Amor no pasa nada — le sonríe — Yo te perdono ¿Si? No te preocupes que no estoy enojada, ve a terminar tu helado — besa su cabeza

– Perdón

– Está bien corazón, ya faltaba poco para decirlo de todos modos — le guiña — Hugo, terminen su helado en la sala de juegos con Esperancita — mira a la muchacha — Enseguida los alcanzamos ¿Si?

– Si ma, vente Rafa






Luego de que los niños salieran de su campo de visión Esteban se puso de un pésimo humor cuando observó a su madre quitarse la servilleta de encima de las piernas y ponerla en la mesa con una mala cara.






– Fuiste tan irresponsable como para meterte en un caso peligroso y sufrir un atentado ¿Estando embarazada? Encima de todo nos lo ocultan, ese bebé es nuestro nieto y tenemos derecho a saber de su existencia

Etéreo Where stories live. Discover now