¿Cólicos?.

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– Mi amor así no puedes ir a la oficina — insiste

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– Mi amor así no puedes ir a la oficina — insiste

– Cielo son cólicos nomas

– Linda, toda la noche te estuviste inquieta y te oí quejarte varias veces — toma asiento frente a ella — Es fin de semana, le hablaré a Rodrigo para avisarle, no era obligatorio asistir

– No pero quería adelantar un par de cosas para no ir el lunes

– No voy a dejar que salgas así de la casa, normalmente no tienes cólicos así de fuertes, quédate a descansar

– Cada mes es diferente

– Yo sé pero aún así nunca te habías desvelado por dolor, hazme caso y quédate

– Bien, avisale a Rodrigo que no voy — suspira masajeando su cuello

– ¿No quieres que vayamos al hospital? Me preocupa, estás un poco pálida, los dolores van y vienen...

– No es necesario, ya me tome algo para los cólicos y la palidez es normal, estamos en el día uno

– Insisto amor, nunca te pones así, estoy preocupado — toma su mano — Promete que iremos si el dolor continúa

– Veremos, mejor ven aquí y acuéstate conmigo ¿Hugo ya se fue a su práctica? — se acuesta de lado

– Ya, mi papá vino por Rafa luego va a pasar por Hugo, nos invitaron a almorzar pero no iremos, no contigo así

– Ay para el mediodía ya se me va a quitar

– Dejate cuidar — la abraza — ¿Para qué estoy si no?

– ¿Y me vas a consentir también? — sonríe recostando la cabeza en su pecho

– Todo el día, si se te antoja algo, nomas pide que yo te lo consigo

– Por ahora sólo quiero que estemos así abrazados, voy aprovechar el calor de tu cuerpo, esa es una de las ventajas de haberme casado contigo, ya no necesito bolsa de agua caliente cuando tengo cólicos

– Entonces dijiste que si ¿Por eso?

– Por eso y porque te amo — ríe bajo — Pero si fue uno de los factores decisivos

– Pero en el verano me empujas de la cama porque dices que te genero calor

– Bueno es que en el verano es otra cosa

– Ahora que lo pienso, siempre tienes las manos y los pies fríos ¿Por eso te pones calcetas todo el tiempo?

– Pues si, es que te me pegas mucho en las noches y mies piecitos están helados siempre, para que no te quejes me pongo calcetas

– Amo tus pies fríos — ríe — Son muy bonitos, a ver, dejame verlos

– Tengo calcetas Esteban

Etéreo Where stories live. Discover now