Tacto || TaeGyu

35 || Padres ㅡ Dos

Okey, todo se fue a la mierda.

Había cumplido con su palabra de ir por BeomGyu a las tres en punto junto con una bolsa de papitas fritas, habló con los padres de este para asegurarles que no iban a ir a ningún lado más y que él mismo lo regresaría, hasta les dio su dirección y número por si querían pasar a buscarlo antes.

Todo transcurrió tranquilo, vieron distintas películas animadas o algunas películas de suspenso que TaeHyun escogió, nada fuera de lo normal. Hablaron un poco sobre la noche anterior, llegando al acuerdo de que no harían nada más y que quedarían cómo amigos que se estaban conociendo.

BeomGyu no se sentía listo y TaeHyun tenía miedo de seguir avanzando tanto muy rápido. Además BeomGyu le aclaró a TaeHyun que no quería hacer nada a escondidas de sus padres.

Todo estuvo bien, TaeHyun llevó a BeomGyu a su casa y hasta se quedó a comer un poco en la casa de los Choi. Nadie mencionó algo de lo que sucedía entre los quinceañeros, los menores por vergüenza y los adultos para no molestar o incomodar a alguno de los dos, sin embargo, ninguno de los dos podía evitar prestarle más atención de la debida al rubio, analizando todas sus palabras o sus pequeñas acciones.

Vamos, son jovenes y la mayoría de ellos son sólo inmaduros e inexpertos en el amor. ¿Qué saben mucho? No podrían saber menos.

TaeHyun estuvo tranquilo, recostado mirando el techo sobre su cama, usando su celular para hablar por llamada con BeomGyu, también hablando por chat con su tío. Pronto iba a ser una celebración escolar por el día de la juventud, si sus padres no irían, sus tíos sí.

Nada podía salir mal, estaba tranquilo, relajado, hablando con la persona que le gustaba y casi apunto de caer dormido, ya pasaban de las doce de la noche, aprovecharía que el día siguiente era sábado para desvelarse sin preocupaciones. Escuchó la puerta de su habitación abrirse con fuerza, por inercia colgó la llamada y se sentó de inmediado, mirando a su padre con una expresión asustada camuflada con una expresión sorprendida.

ㅡ ¿Qué? ㅡ Preguntó confuso, ninguno de sus padres pisaba su habitación, menos a altas horas de la noche cuando se supone que seguían trabajando. Se tensó al ver acercarse a su padre, y más cuándo le arrebató el celularㅡ ¿Qué? ㅡ Volvió a preguntar.

ㅡ Cállate. ㅡ De sus ojos empezaron a caer lágrimas inevitablemente, sorprendido y asustado por el golpe que le dio su padre entre su labio y su nariz. Su padre podía pecar de tantas cosas, hasta de odiar a su propio hijo, pero nunca le había pegado de esa forma.

TaeHyun se giró hacia la puerta, mirando a su madre entrar rápido, hasta ella misma había ido corriendo a ver por el golpe que sonó en una parte de aquella lujosa casa. De sus ojos seguían cayendo lágrimas, de la misma forma en la que caían gotas de sangre de su nariz.

ㅡ ¡¿Qué haces?! ㅡ Gritó su madre al verlo, su padre estaba revisando su celular, sí, tenía la contraseña. Al entregarle el celular a TaeHyun se la dio con contraseña, tenía prohibido cambiarla. TaeHyun pensó que nunca se lo revisaría, porque pasaron casi dos años y nunca se lo pidió.

No tenía ni idea de que iba a revisar, pero tenía miedo igual. Se echó hacia atrás cuando su madre quiso tocar su rostro para revisarlo, si le iban a seguir pegando por algo que ni sabía que hizo, no lo iba a permitir.

Se asustó cuando su padre tiró su teléfono a un lado y se le acercó nuevamente, esta vez sujetandolo de su pijamaㅡ ¿Qué mierda crees que haces? ¿En serio eres un Kang? ㅡ

Miró a los lados, cayendo en la mirada de su madre, ella tampoco sabía que pasabaㅡ ¿De qué hablas...? ㅡ Murmuró en un tono bajoㅡ No he hecho nada, papá. Salí con buenas calificaciones, sigo estudiando para ingresar a la carrera de Derecho y ya terminé mis clases de idioma. ㅡ