•𝐒𝐎𝐋𝐎 𝐑𝐄𝐒𝐈𝐒𝐓𝐄• || CARL GRIMES || [TWD]

CAPÍTULO 33

Todo por una amiga

Jennette

Subo a la base donde Enid no se ha despegado en toda la tarde e inicios de la noche por esperar a que Alden regrese. Aquí arriba está demasiado fresco que he decidido subirle un suéter que encontré en su closet. La tela es demasiado suave que me recuerda a esos que Maggie usaba en sus últimos meses de embarazo, no tengo la duda de que este le pertenecía a ella y por alguna extraña razón decidió dejarlo. Mi teoría es que le quedan ahora tan grandes que serían un estorbo para matar caminantes.

Me sonríe con agradecimiento cuando se lo pongo alrededor de los hombros esperando a que meta los brazos en las mangas. Yo tengo uno que de igual manera encontré en su habitación, ahora que no tengo ropa me ha dado la oportunidad de ponerme sus trapos, esta noche tengo un pantalón de mezclilla entubado y abajo una playera de tirantes. Solo eso necesito (aunque no me guste).

Le echo un vistazo al exterior del lugar. La luna ilumina la cosecha alta que han estado sembrado, fuera de eso, más adelante el bosque es demasiado oscuro que no se logra ver nada. Lo que ella quiere conseguir es ser la primera en recibir a Alden, estar preparada al verlo caminar por el sendero.
    
—Deberías bajar a cenar— sugiero delicadamente para no minimizar su acción y menos sus intenciones.

Suelta un quejido de brazos cruzados negando con la cabeza. El pelo corto me deja ver su mentón y ese labio superior que no tardará en sangrar si se sigue mordiendo de los nervios, en las sombras de la oscuridad de nota lo cansada que está.
    
—Lo único que necesito es esperar a Alden.

Decido no insistir. Pago las manos en el muro de madera jugando con la textura de lo que está hecho. Es rugoso que termina lastimando la yema de mis dedos, pero no me importa.
    
—Parece que te gusta mucho— mi voz se escucha baja, como si fuera tímida con ella, pero Enid ya conoce hasta mi ropa interior que cargo puesta ahora mismo.

Sonríe de lado a mi comentario, intenta estar calmada y aunque la oscuridad de la noche nos ha cubierto en sombras, sé que se ha sonrojado a mi suposición repentina. Niega en un movimiento ligero que apenas puedo notarlo, sus cabellos bailan a la sacudida.
    
—Como no tienes idea. Es un chico que me hace sentir bien en momentos tan oscuros— ladea la cabeza. No la he dejado de ver en ningún segundo para atrapar ese brillo en sus ojos —Sabes a lo que me refiero.

En mi mente pasan incontables recuerdos de Carl haciéndome sentir así. Recuerdo nuestro primer beso, recuerdo nuestras primeras salidas a escondidas, recuerdo muchas cosas en pocos segundos que mi cuerpo se mueve inquieto al no soportar un tipo de soledad inexplicable por parte de él. Llega un punto en el que me arrepiento de quedarme, de huir de Alexandria como una cobarde.

Quisiera abrazarlo, quisiera besarlo, quisiera decirle que lo amo. Estaría haciéndolo si no fuera tan orgullosa...si solo hubiera confianza entre nosotros.

Aclaro mi garganta para deshacer el nudo que me aprieta a tal punto de dolerme.
    
—Él regresará, fue con Luke, solo...tratemos de descansar por unas horas. Si no regresa hasta la media noche te ayudaré a buscarlo.

Alza las cejas sorprendida.
    
—¿Estás dispuesta a arriesgarte por él? Puedo ir sola. No tienes que...
    
—Lo hago por ti— me apresuro a decir tocando su antebrazo —Dijiste que Alden te hace bien y si es así, vale totalmente la pena. Me arriesgaré para buscarlo contigo— le doy un ligero apretón, uno que le relajan las facciones —Recuerda, somos amigas.

—Eso me pone más tranquila— susurra tan bajo que apenas puedo escucharla entre la brisa de la media noche.

Desinfla sus pulmones poco a poco, vuelve a tomar aire echando otro vistazo al bosque solitario. Regreso ver a mis alrededores donde el único que está haciendo guardia cerca de nosotras es Kal junto con una mujer del otro lado de la base cerca del granero. Están tan distraídos que no se darían cuenta si saltamos de aquí (cosa que es imposible caer sin ningún daño). Estudio a los guardias para tener una idea de cómo salir sin que se den cuenta.
    
—¿Qué pasó con esa chica? ¿Hay noticias nuevas?