El loquito del centro

Capítulo 90

-¿Te convertiste en un omega?;¿Recesivo?

Tan pronto como el coche que conducía en la carretera se detuvo en un tranquilo terreno baldío, el presidente Kang abrió la boca. Los ojos arrugados se movieron.

-¿Por qué no me contactaste en cuanto lo descubriste?; ¿Has cambiado de opinión?

-Ah.

La pregunta le recordó a Sun Woo lo que Kang Jin Tae me dijo. "¿Has cambiado de opinión? Espero que no lo hayas hecho", y "¿No sería bueno?"

-No sé de lo que está hablando, presidente.

No era conocido por Sun Woo qué tipo de transacciones habían hecho el presidente Kang y Choi y qué palabras iban y venían. Porque todo lo que pudo averiguar era lo que estaba escrito en el contrato.

Sin embargo, basado en lo que dijo el presidente Kang o Kang Jin Tae, parecía haber más. Quizás tenía que ver con la expresión del segundo género.

Los ojos del presidente Kang, que habían estado mirando hacia adelante, se voltearon hacía Sun Woo. Sus ojos eran como los de una serpiente.

-Pensé que eras un poco inteligente, pero supongo que no.

-Sr. Presidente.

-Bueno, sí. Podría ser muy codicioso. Te dejaré tener bebés si así lo deseas.

-¿Qué?

'¿De qué estás hablando?' Sun Woo parecía avergonzado por los comentarios inesperados del presidente Kang. ¿Sabía que estaba embarazado? Incluso se le ocurrió por un momento.

-Pero será criado enteramente en mi familia. No podrás presentar ningún derecho del niño después de dar a luz.

La siguiente palabra eran sonidos que destruirían incluso la mínima ilusión de una sola vez. '¿Qué quieres decir con que puedo tener hijos, pero no tener los derechos?'

-Y debes irte en silencio.

Finalmente, el presidente Kang dijo todo lo que quería decir antes de mirar a Sun Woo de nuevo.

'Wow... eres tan cruel'.

Sun Woo mordió la carne de su boca con fuerza y miró al presidente Kang. Cuanto más oía, más increíble sonaba.

Recordó lo que habló con Kang Jin Wook la última vez. Si el presidente Kang sabía que estaba embarazado, perdería a su hijo. Y tendría que vivir como una sombra y su hijo como rehén por el resto de tu vida.

Eso fue probablemente lo que Kang Jin Wook dijo mientras reflexionaba sobre la vida de su madre y la de él. No sería otro que el presidente Kang sentado a su lado quien le hiciera hacerlo.

-Sr. Presidente.

Finalmente, Sun Woo abrió la boca.

-Eso significa que tengo que irme de todos modos, ¿Verdad?

-Sí, me entiendes bien. Si haces eso, te pagaré el precio que prometí.

El presidente Kang respondió con los ojos entrecerrados. Debía estar sonriendo, pero a Sun Woo le pareció escalofriantemente frío.

Lo notó instintivamente. No debería enterarse de que estaba embarazado. Pero no podrá ocultarlo para siempre. ¿Kang Jin Wook me protegerá?;¿Hasta cuándo?; ¿Cuánto tiempo? ¿Podré engañar al presidente Kang hasta el final?'

-¿No era lo que querías en primer lugar?. Una recompensa. Terminemos el contrato así. Accederé todo lo que quieras si te vas en silencio.

Kang Jin Wook y Im Hae Won estaban juntos en el hotel. Suponía que iban a hacer "eso". En primer lugar, él era un extra. No podría pedir más que eso.