Ardiente pasión o la villana decide ser feliz

Capítulo 2

Cuando Marianne abrió la puerta, se sorprendió al ver a Evan, su esposo. "¿Cuánto había escuchado?" se preguntó, aunque daba igual, no había dicho nada que no fuera verdad.

-Supongo que ya te avisaron de la escuela del problema, nada que no pueda resolverse. Adentro están Julien y Liz para que te digan lo que ocurrió.

Marianne se alejó sin decir nada más, mientras pensaba en todas las ocasiones en que había tratado de que su esposo les explicará la importancia de la conducta a sus hijos.

Aunque en el fondo recordó que el mismo Evan había hecho lo que había querido en su juventud. Había hecho casi todo, solo había fallado en casarse con la chica que quería. Marianne no pudo evitar sonreír por dentro.

"Si tan solo Evan se hubiese casado con ella, todos habrían evitado los conflictos."

Marianne no había dado ni dos pasos, cuando escuchó la voz de su esposo.

-Debemos hablar.