failure | connor [dbh]

xvi

9 de noviembre, 2038

18:13 p.m.

Connor

El jardín Zen está completamente congelado frente a mi.

Me mantengo entre la nieve. Completamente inmóvil. Sintiendo como la nieve comienza a cubrir mis hombros. Con el propósito de hablar con Amanda respecto a lo ocurrido con Kamski hace unas horas atrás. Pero en lo único que puedo pensar en ese momento es en las palabras de Juliette. Y en la forma cruel en la que respondí a ellas. 

Aunque quisiera evitarlo a toda costa, se me hacía bastante difícil quitar de mi sistema su expresión de decepción a mi presencia frente a ella. 

Pero nuevamente recaigo en la situación en la que me encuentro y en la que está el país a nivel nacional. La misión que se me ha sido asignada. No es momento para pensar en ello. Lo único que importa es cumplir mi misión y acabar con los divergentes. 

Tal vez... tal vez Amanda tenga razón respecto a ella. Es solo una distracción para mi propósito. 

Intentando ignorar todo lo ocurrido con la subteniente Moore, me limito a buscar a Amanda en el ambiente frío. No demoro en hacerlo, notando que está en medio del lago congelado. Esperando mi presencia. 

Me acerco hasta ella en cuestión. Sin hacerla esperar más por lo delicada que está la situación en este momento. Al poner un pie sobre el hielo, este cruje casi al instante, haciéndome permanecer alerta. Por lo frágil que se ve, puede romperse en mil pedazos. Haciéndome caer en él en una fracción de segundo. 

Avanzo en el lago con preciso cuidado, hasta mantenerme justo frente a ella. Manteniendo una ligera distancia entre nosotros. Puedo percibir al instante una actitud desconfiada a mi presencia, además de analizar la expresión de su rostro.

Por mi comportamiento los últimos días, no parece confiar en mí. 

—Después de lo que pasó hoy, el país está al borde de una guerra civil. Las máquinas se vuelven contra sus amos. La única opción de los humanos es destruirlas. 

Titubeo mi respuesta. Sin saber mucha información que nos pueda ser útil en ese momento. Lamentándome por aquello. 

—Creí que Kamski sabía algo... —me mantengo en silencio por una fracción de segundo. Finalmente, bajo la mirada. Sintiendo decepción de mí mismo— Estaba en un error.

—Tal vez si sabía. Pero preferiste no preguntar.

Su respuesta es hostil. Y no logro descifrar porque sus palabras me generan molestia. 

—¡Elegí no jugar a su jueguito retorcido y enfermo! —me defiendo sin pensarlo. E inconscientemente vuelvo a sentir aquella inestabilidad en mi sistema— No había razón para matar a la androide. 

No responde. Pero puedo percibir la completa decepción a mis palabras. Además de la molestia reflejada en su rostro. Aunque se mantenga completamente en silencio, su expresión delata sus pensamientos respecto a mi respuesta. 

Por un momento logro recordar la fotografía que vimos en la casa de Kamski. El hecho de que Amanda estuviese ahí junto a él. Y que ahora estuviese frente a mí. 

—Vi una foto de Amanda en la casa de Kamski —menciono— Ella fue su maestra...

—Cuando Kamski me diseñó, quería una interfaz con aspecto familiar. Por eso eligió a su mentora. ¿A qué quieres llegar? —me interroga.