Park t/n, 18 años, hija de uno de los empresarios más importantes de todo Corea. Amable y tierna con quienes ama, algo distante con los demás pero agradable.
Lee Heeseung, 23 años, hijo de uno de los empresarios más importantes de todo Corea. Amable...
Era el día de mi graduación, me encontraba arreglándome para aquel gran evento uno de los más importantes de toda mi vida.
Les seré honesta con todo lo que ha pasado durante estos 4 años; Hace 2 años Heeseung y yo tuvimos un gran problema debido a una chica de su trabajo, jamás desconfíe de él pero aquella odiosa me causó enojo haciendo que ambos tuviéramos una discusión muy fuerte. Dirán que fui infantil pero decidí irme a vivir de nuevo a mi casa. A los días llegó Heeseung todo triste y se veía muy pero muy mal, a decir verdad también estaba muy mal pero no quería que nadie lo notara, y en cuanto a la chica Hee la despidió de inmediato.
Arreglamos aquel problema y me fui nuevamente a nuestro departamento, al mes mi pequeña Stormi se casó con Jeonghan y aquella boda fue bastante hermosa, a principios del año nació su pequeño bebé llamado Joshua.
Hace 1 año nos llevamos el susto de nuestras vidas JAJAJ tuve un retraso algo largo y eso nos alarmó a ambos y no es que no quisiéramos formar una familia pero sentimos que en ese tiempo aún no estábamos preparados. Sin embargo, sólo quedó en un susto puesto que resultó siendo un pequeño descontrol hormonal y estuve en tratamiento tres meses.
Este año tres meses antes de que llegara este gran día tomé posición como presidenta en la empresa, hice algunos cambios debido a que traía diferentes maneras de trabajar pero mis colegas supieron manejarlo bastante bien. Estos tres meses he estado un poco ocupada por la empresa y la Uni. Pero por fin esto ya terminó y sólo tendré un pendiente.
Tanto a mi relación con Hee diría que estamos bastante bien, cada que tenía vacaciones viajábamos a distintas partes del mundo y una de ella fue a tp. Heeseung quedó enamorado de todo y dijo que teníamos que volver a ir.
Obvio como toda pareja hemos tenido nuestros momentos malos y es que a veces solemos chocar pero después encontramos la manera de estar bien y lo logramos.
Por parte de Heeseung en la empresa le está yendo más que genial, ha logrado en este tiempo ser de los dos primeros lugares a nivel mundial como el mejor empresario, cosa que me hace estar bastante orgullosa de él.
En fin, me encontraba arreglándome para la ceremonia, si les digo la verdad es que ni quería asistir pero obvio que tenia que hacerlo.
- ¡Ay, es que no quiero ir! —reproché—.
Sentí unas manos recorrer mi cintura y posicionar su mandíbula en mi hombro.
Heeseung: Pero tienes que ir princesa.
- ¡Ash! Ya lo sé —dije haciendo un puchero—.
Heeseung: Además, después de eso te tengo una sorpresa.
- ¿Qué es? —volteé a verlo—.
Heeseung: Es sorpresa, niña —tocó la punta de mi nariz—.
- ¡Agh! Ya sabes que soy curiosaaa.
Heeseung: Lo sé, pero tendrás que esperar.
Juntó nuestros labios en un beso apasionado, si antes no quería ir pues ahora menos.
Heeseung rio ligeramente y se separó para después besar mi frente.
Heeseung: No, no, se nos hará tarde.
- ¡Ash! Que malo eres.
Heeseung: Lo sé mi amor —habló riendo— ahora termina de arreglarte.
Rodé los ojos y terminé de hacer todo ¡PR FIN!.
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